En el edificio donde se ha desatado el fuego en Lemoa se guardaba plásticos y bidones de gasóleo. Se utilizaba de almacén desde que, al menos diez años, la empresa Opel cerrase sus puertas.
Bomberos de cuatro parques han trabajado a destajo para controlar las llamas que han devorado el edificio. Según han explicado los bomberos que trabajan en el lugar en la planta menos uno del inmueble había gran carga de fuego porque era ahí donde se había acumulado el plástico y el gasóleo que ha cogido fuego. "Hemos tenido que atacar el fuego con muchos medios. Ha sido complicado, pero el edificio finalmente ha colapsado", ha comentado.
Lo primero que han hecho ha sido sobre las 2.00 de la mañana evacuar a las personas que residían en el portal contiguo al inmueble y de los bloques de alrededor. A media mañana el fuego estaba controlado aunque todavía los trabajos no han finalizado. Los bomberos siguen intentando bajar la temperatura de la estructura quemada y eliminar así la nube de humo que afecta a las personas que trabajan alrededor y al resto de los vecinos de Lemoa. De hecho, la Ertzaintza mantiene la recomendación de no abrir las ventanas ante la gran humareda.
