Una tarde para hacer acopio de récords en el Surne Bilbao Basket

En el primer momento de la temporada en que el calendario apretaba y podía poner una pesada piedra en la mochila del grupo, el Surne Bilbao Basket respondió con sus dos mejores actuaciones hasta ahora de un curso apenas incipiente que ayer cumplió solo su décimo partido. Los triunfos ante el Peristeri y el Casademont Zaragoza deben servir para cargarse de confianza, propia y ajena, y de esa tranquilidad, propia y ajena, siempre necesarias para seguir creciendo como conjunto. Todas las piezas encajaron en cuarenta minutos de baloncesto espectacular en las dos mitades del campo y los hombres de negro pudieron convencerse del camino a seguir. No todos los días saldrán las cosas tan bien como ante el Zaragoza, ni todos los días saldrán tan mal como ante el Joventut en Badalona. Lo normal es buscar un equilibrio siempre desde la competitividad que mostró ayer el equipo de Jaume Ponsarnau.

Un partido que se temía por la calidad del rival acabó sirviendo para que el Bilbao Basket hiciera acopio de récords. Ponsarnau logró su victoria 200 en la Liga Endesa después de 486 partidos dirigidos en la máxima categoría. Con la de ayer, son cuarenta en su cuarta temporada en el banquillo de Miribilla. Su equipo logró ayer la quinta máxima anotación de su historia en la ACB, la segunda en un partido sin prórroga. Por su parte,Melwin Pantzar superó el tope de asistencias con catorce y superó las once que habían logrado Javi Salgado en dos ocasiones, Quino Colom en tres, Jonathan Tabu y Ludde Hakanson. Todo el equipo alcanzó las 29, que también son un récord para el club en la competición.

Todo el mundo se contagió de la efusividad en ataque y, por ejemplo, surgió la mejor versión de Darrun Hilliard, que tras unos partidos con la puntería esquiva anotó seis triples de siete intentos. Justin Jaworski no quiso ser menos y sumó cinco aciertos en doce lanzamientos, que pueden parecer muchos, pero que no son más que una muestra de aquello que ha venido a hacer a Bilbao.

Defensa muy sólida

Al margen de una eficacia en ataque que será difícilmente repetible, los hombres de negro estuvieron también a un gran nivel en defensa, con mucha actividad hasta sumar diecisiete recuperaciones y forzar 26 pérdidas a los visitantes. Resulta muy meritorio dejar en 75 puntos a un rival que promediaba 92. En tres cuartos, los maños solo habían anotado 45 y engordaron su marcador en el último cuarto gracias a los quince tiros libres que anotaron.Margiris Normantas fue el único jugador que no anotó en este festival, pero el lituano fue clave en el trabajo de retaguardia. Entre él y Stefan Lazarevic amargaron la tarde a Santi Yusta, que antes del último cuarto llevaba solo cuatro puntos que engordó con una buena ración de tiros libres.

Total, que el Surne Bilbao Basket dio un salto hacia la zona media de la tabla en una jornada en la que volvió a demostrarse que la Liga Endesa no perdona y los equipos poderosos se llevaron una buena ración de derrotas. Los vizcainos siguen protegiendo Miribilla como primer mandamiento en cualquier temporada. Es la base sobre la que construir los objetivos, que nunca son inamovibles, sino que crecen y menguan en función de los resultados.