El Surne Bilbao Basket viajará a Turquía con un magnífico botín de doce puntos (84-72)
Los de Ponsarnau, muy enérgicos, dominaron con autoridad desde el salto inicial al Tofas Bursa en la ida de los cuartos de final de la FIBA Europe Cup
El Surne Bilbao Basket viajará a Turquía la próxima semana con un fantástico botín de doce puntos a su favor que le acerca, aunque aún queda mucho trabajo por hacer, a las semifinales de la FIBA Europe Cup. El conjunto vizcaino realizó este miércoles un trabajo intachable para atar en corto al Tofas Bursa, descender en veinte puntos su promedio anotador en la competición y firmar un más que interesante 84-72 en un encuentro que dominó de principio a fin pese a la incuestionable riqueza de recursos del rival y a un arbitraje horrible y desquiciante.
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Pero los de Jaume Ponsarnau resistieron contra todo y contra todos con un muy buen trabajo de retaguardia para no dejar que las individualidades rivales cogieran vuelo. Saltaron a cancha dominantes, fabricaron muy pronto distancias tranquilizadoras, aguantaron todos los intentos de rebelión de su rival y acabaron con un muy buen resultado a su favor. Incluso pudo ser mejor, pero los colegiados permitieron a los visitantes gozar de seis tiros libres fruto de acciones discutidísimas dentro de los 30 segundos finales.
Con cuatro jugadores en dobles figuras (Thijs De Ridder, Zoran Dragic, Harald Frey y Marvin Jones), los anfitriones siempre gozaron de buenas vías de suministro de puntos, mientras que su rival, con un horrible 2 de 20 en el triple, encontró muchos más problemas fuera del juego de espaldas a canasta de J.J. O’Brien y los mates de Kris Bankston. Marcquise Reed acabó con 15 puntos, nueve de ellos gracias a los tiros libres, entre ellos los seis antes mencionados
Arranque arrollador
El conjunto vizcaino le dio un arranque excelente a la contienda. Muy bien armado en retaguardia, fue capaz de fusilar desde la larga distancia además de viajar con continuidad a la línea de tiros libres y, además, sacó del partido al peligroso Reed con dos faltas en menos de cuatro minutos. Así, el banquillo visitante tuvo que parar el choque con el 12-2 en el ecuador del acto inaugural. Haciendo gala de un juego magnífico, tan enérgico como atinado, el colchón de los anfitriones se hinchó hasta un abrumador 21-4 antes de que los de Orhun Ene empezaran a cogerle el aire al choque, logrando cierta compostura para llegar al final de los diez primeros minutos con un 26-14.
Intentó el Tofas Bursa agarrarse al duelo activando los ‘muelles’ de Bankston en las distancias cortas y, aunque los de Ponsarnau respondieron a la perfección en primera instancia (33-18 a 6:45 del descanso), los locales tuvieron que parar el partido poco después con el 33-25 tras un parcial de 0-7 y su contrincante mucho más serio atrás y, sobre todo, con mejor circulación de bola en ataque. Con Reed de nuevo en cancha atrayendo atención y generando desequilibrio, la escuadra turca se sentía mucho más a gusto mientras los ‘hombres de negro' empezaban a dejarse puntos cómodos por el camino. Elevando su nivel de intensidad atrás pese a las tres faltas que acumulaban ya Reed, Anzejs Pasecniks y Demir, los de Ene estrecharon márgenes hasta el 37-33, pero un minuto y medio extraordinario, con ocho puntos seguidos de Frey y un mate de Amar Sylla tras robo por pura fe de De Ridder, volvió a impulsar a los locales hasta un magnífico 47-35 en el ecuador de la contienda.
A esas alturas de partido, la gran diferencia de efectividad desde la distancia triple (6 de 15 los de Ponsarnau; 1 de 8 los de Ene) y en la facturación de puntos al contraaataque (10-3) marcaba notables diferencias, mientras que los turcos resistían merced a su mayor ahínco desde posiciones cortas e intermedias (10-26).
Resistencia
Sin embargo, la vuelta de vestuarios no fue tan grata para los anfitriones, con demasiados balones perdidos en su hoja de servicios. Tampoco para los árbitros, que además de su exasperante lentitud a la hora de señalar las infracciones se tragaron un par de faltas antideportivas turcas en situaciones de contraataque de los de Ponsarnau. Hasta el 37-33 se acercaron los turcos tras tres tiros libres de Reed antes de que Muhammad-Ali Abdur-Rahkman tomara cartas en el asunto para facilitar con seis puntos, mate incluido, un parcial de 11-0 coronado por un triple de Rubén Domínguez (y un par de enormes defensas de Sylla) que volvió a abrumar a los visitantes, llevando el choque a sus diez minutos finales con un magnífico 65-50.
Activando al poste a Gecim y O’Brien y aprovechando un par de despistes en el cuidado del rebote, el Tofas Bursa volvió a evitar el descarrilamiento, encadenando un parcial de 1-11 (66-61). El Surne Bilbao Basket se mantuvo en pie como pudo pese a sumar un solo punto durante casi cuatro minutos y medio del arranque del acto final, pero dos triples seguidos de De Ridder y Melwin Pantzar le devolvieron muchísimo oxígeno (72-61). Y para fabricar la mayor ventaja posible de cara al partido de vuelta, surgió además la figura de Jones, excelente en labores de intendencia en el aro rival. Lástima que al brutal 81-66 a 30 segundos del final mermara con seis tiros libres de Reed por dos faltas discutidísimas y una técnica al banquillo bilbaino, aunque el ‘dos más uno’ de Frey colocó en el marcador la justicia que los árbitros no supieron darle al partido.
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