El Surne Bilbao Basket sale de las fiestas navideñas mucho más entero y revitalizado de lo que entró en ellas pese a la última derrota cosechada el pasado sábado en el Santiago Martín de Tenerife. Las tres victorias consecutivas, y también autoritarias, cosechadas ante Baxi Manresa, Leyma Coruña y Morabanc Andorra han impulsado a los de Jaume Ponsarnau hasta la zona templada de la tabla, con un aceptable balance de seis triunfos y nueve derrotas y con un buen colchón de dos partidos con respecto a la zona de descenso. La clasificación sigue estando tremendamente apretada, con muchos equipos apelotonados en la zona media-baja, pero los hombres de negro y su entorno ven las cosas con muchísimo más optimismo que hace apenas veinte días, cuando el hecho de encadenar cinco derrotas seguidas encendió las primeras luces de alarma en la franquicia de Miribilla.

El conjunto vizcaino, a la espera de poder recuperar al lesionado Kristian Kullamae y de que el escolta dominicano Omar Silverio obtenga de una vez por todas el visado que le permita desplazarse hasta Bilbao para reforzar la desacertada batería exterior del equipo, afrontará a partir de ahora un nuevo examen de solidez y entereza con su retorno a la actividad en la FIBA Europe Cup, lo que provocará que en el plazo de 32 días tenga que disputar nueve encuentros, con la clasificación para la siguiente fase continental en juego y con un tramo de calendario de gran exigencia e importancia en la Liga Endesa. El choque de mañana (20.00 horas) ante Le Portel en Miribilla dará el pistoletazo de salida a este carrusel de citas que definirá en gran medida el futuro deportivo de la escuadra de Ponsarnau.

En aguas europeas, el rumbo de los hombres de negro está bien fijado después de inaugurar el Grupo L ganando a domicilio al Banco di Sardegna Sassari y en casa al potente Cholet y ahora deberán afrontar dos partidos seguidos en Miribilla que podrían impulsarle hasta la ronda de play-off junto a otros siete supervivientes. El primer examen será ante un Le Portel que ocupa la penúltima posición en la competición francesa con solo tres éxitos en su zurrón, mientras que posteriormente comparecerán en el Bilbao Arena los italianos, décimos en su liga con un balance de seis victorias y ocho derrotas. Sacar adelante estos dos encuentros se antoja fundamental, pues a continuación los de Ponsarnau cerrarán su participación en el grupo con dos visitas a los conjuntos galos.

La escuadra vizcaina deberá compaginar esta labor continental con una fase de cinco encuentros de Liga Endesa de notable importancia y dureza. En primera instancia, cerrará la primera vuelta de la competición recibiendo este sábado (18.00 horas) a un rocoso y embalado Unicaja que encabeza la tabla clasificatoria junto al Valencia Basket con un balance de doce éxitos y solo tres partidos perdidos y cuyas últimas visitas a Bilbao han sido para los anfitriones como una visita al dentista –durísimo 43-67 la pasada temporada, 71-103 en la anterior– y a continuación rendirá visita a un Barça que, al igual que la institución, vive un momento convulso y dubitativo, clasificado a día de hoy en una impropia novena posición con el mismo número de citas ganadas y perdidas, siete, y que se jugará probablemente en ese choque parte importante de sus opciones para jugar la Copa.

Rivales directos

Posteriormente, el arranque de la segunda vuelta emparejará al Surne Bilbao Basket con adversarios directos en su principal lucha, la de evitar las posiciones de descenso. Abrirá fuego visitando a un Río Breogán muy mejorado desde el aterrizaje en su banquillo de Luis Casimiro en sustitución de Veljko Mrsic (tres victorias en sus últimos seis compromisos) y que en el encuentro inaugural del presente ejercicio cayó en Miribilla por un contundente 90-72 –esa semana no hay competición europea, por lo que Ponsarnau la tendrá entera para preparar este compromiso–; posteriormente ejercerá de anfitrión frente al Hiopos Lleida, el rival que provocó el encendido de las luces de alarma por la dura derrota (84-66) cosechada en el Barris Nord con un tremendamente dañino 49-33 en la segunda mitad y por último tocará desplazarse hasta Manresa, una de las tres víctimas de los hombres de negro (88-73) en su racha triunfal de tres encuentros consecutivos.

Tras esta cita, llegará el prolongado parón competitivo de febrero, al que el Surne Bilbao Basket aspira a llegar en la posición más desahogada posible en la Liga Endesa y todavía en acción dentro de la FIBA Europe Cup. l

Calendario hasta el parón

Surne Bilbao Basket-Le Portel Mañana (20.00 h.)

Surne Bilbao Basket-Unicaja Sábado (18.00 h.)

Surne Bilbao Basket-Sassari 15-I (20.00 h.)

Barça-Surne Bilbao Basket 19-I (17.00 h.)

Breogán-Surne Bilbao Basket 25-I (18.00 h.)

Cholet-Surne Bilbao Basket 29-I (20.00 h.)

Surne Bilbao Basket-Lleida 02-II (17.00 h.)

Le Portel-Surne Bilbao Basket 04-II (20.00 h.)

Manresa-Surne Bilbao Basket 08-II (18.00 h.)