¿Imagino que estará contenta con la renovación?

-Agradezco que el club haya confiado en mí y espero dar lo que pueda estos dos años.

¿Alguna vez pensó que iba a jugar una década en el Athletic?

-La verdad es que no. No sabía cómo era todo esto y ni me imaginaba que iba a poder llegar a estar con el Athletic diez temporadas en Primera División.

Echando la vista atrás, el cambio que ha sufrido el fútbol femenino es muy grande en los últimos años.

-Se nota mucho. Los equipos están trayendo más gente de fuera, se están preparando mucho mejor y se ha notado mucho la mejora de la preparación, tanto física como mental, los entrenamientos y la exigencia ahora mismo es máxima.

Moraza y Lucía no han firmado, Istillart y Gimbert lo dejan, Nekane acaba de renovar, Unzué, Erika y Eunate también están a la espera… ¿Le costó mucho firmar?

-Llevábamos un tiempo hablando. El Athletic está negociando con la gente y cada una decidirá lo que sea mejor para cada una. Lo mejor para mí era renovar y estar aquí, pensar en mí y así lo he hecho.

El fútbol femenino también marcha hacia un mundo mucho más profesional.

-Los cambios tienen cosas buenas y otras no tanto. Hay muchos movimientos. Los equipos intentan buscar a las mejores jugadoras y cada una debe buscar su mejora y el sitio donde puede estar mejor. Habrá gente que no lo haga en el Athletic y habrá otra que sí.

¿Cree que el recambio generacional será suficiente para mantener al equipo arriba?

-Al haber tantos movimientos en el mundo en general, a nosotras con jugadoras de aquí se nos complican las cosas, pero el Athletic siempre se caracteriza por su cantera y las jugadoras de abajo llegan con muchas ganas, ilusión y lo dan todo. Es verdad que ganar ligas ahora mismo es muy complicado, porque ha cambiado mucho todo, pero vamos a estar ahí, unos años mejores y otros peores, pero ahí vamos a estar. Eso seguro.

¿Se imagina un Athletic sin Iraia Iturregi en el banquillo?

-En el Athletic nadie es imprescindible. Nosotras nos movemos por el Athletic, que es donde estamos y donde queremos estar. Ha habido jugadoras importantes que se han ido y hemos sobrevivido. Y ahora mismo estamos muy contentas. No sabemos qué va a pasar, pero si no estaría sobreviviríamos y si sigue, contentas de estar con ella. Nadie es imprescindible, pero ojalá siga porque estamos a gusto. Pero esto compete a otras personas.

¿Se marca números como objetivo a principios de temporada?

-No, que va. A principio de temporada lo único que pienso es en no lesionarme. Soy una jugadora que tiende a romperse muscularmente y ese es mi objetivo.

¿Pesa llevar la camiseta con el ‘9’ del Athletic?

-No. Siempre ha sido mi número, aunque los primeros años no lo tuve. Es el número con el que yo estoy cómoda y me gusta llevarlo. Ningún número tiene peso. El peso lo lleva la jugadora en sí dentro.

¿Echa la vista atrás después de una década?

-No lo suelo pensar mucho. Aunque estos días sí que lo he hecho. Yo no me había dado cuenta de que iba a llegar a las diez temporadas y cuando me lo dijeron sí que te hace pensar que pocas personas lo consiguen, encima en el Athletic, que es un club importante en la liga, y eso te hace mirar atrás. Cómo llegué de niña y ahora la experiencia que tengo. Lo que vas haciendo en el vestuario y en el campo te da un poco de orgullo. Y también agradecida al club que me ha demostrado que quiere que lo consiga.

¿Tampoco mirará lo de sus doscientos partidos?

-Pues tampoco. Me enteré el otro día. Yo me centro en el siguiente partido, por si puedo jugar y no lo voy mirando.

¿Qué le ha faltado esta temporada al Athletic para estar luchando por Europa?

-Hasta navidad hicimos una primera vuelta muy buena. A un nivel que en muchos años no habíamos estado así. Luego nos hemos deshinchado un poco. Hemos perdido puntos que no nos esperábamos y es verdad que ahora estamos en tierra de nadie, que no nos jugamos nada. No sabría decirte qué ha faltado. Nosotras vamos con todas las gana a entrenar e Iraia nos ha intentado exprimir al máximo también. Ahora hay que motivarse en los tres partidos que quedan, intentar sacar los puntos y no mirar a nadie más.

¿Igual el sitio del Athletic es el que tiene ahora en la Liga Iberdrola?

-Objetivamente, creo que si hubiéramos hecho una segunda vuelta un poco mejor estaríamos luchando por Europa y el Athletic tiene que estar ahí. Aunque las cosas se están poniendo muy difíciles, creo que nosotras también podemos estar ahí. Hay que tener ese orgullo de decir vamos a luchar por eso.

¿Lo mejor que le ha pasado?

-Ganar la liga en mi segundo año, la última que ha ganado el Athletic. Lo mejor casi que me ha pasado en la vida. Sobre todo ver a Bizkaia echada a la calle, el autobús, el ayuntamiento, fue muy emocionante.

¿Y lo peor?

-Las lesiones. Te merman, pero hay que sobreponerse y tirar para adelante.