El Athletic recibe mañana al Espanyol en el último partido de la decimoséptima jornada de LaLiga, que baja las persianas en San Mamés hasta 2026. Como un duelo directo por Europa se presenta el encuentro dada la quinta posición que ocupa en la clasificación el conjunto catalán, que aventaja en siete unidades al Athletic con un partido menos disputado. Atractivo y competido a priori se proyecta en consecuencia un choque que verá desde la distancia, aunque no demasiada, Álvaro Vázquez (Badalona, 27-IV-1991). El delantero, que defiende actualmente los colores del Arenas, conoce bien el significado de visitar La Catedral con la camiseta del Espanyol, club en el que se formó como futbolista hasta alcanzar el primer equipo y debutar como periquito en Primera División en septiembre de 2010.
Traspasado dos años después al Getafe por 3 millones de euros, cedido al Swansea en 2013 y de vuelta al Espanyol en 2016 para militar posteriormente en otros nueve equipos antes de recalar el pasado verano en el Arenas, el ariete catalán asegura a DEIA guardar “buenos recuerdos” de sus partidos contra el Athletic. Fueron seis encuentros los que disputó en LaLiga Álvaro Vázquez ante el conjunto rojiblanco con un balance de dos victorias, cuatro derrotas y un gol marcado. Lo firmó en el viejo San Mamés en la campaña 2012-13 y sirvió para que el Getafe se impusiera 1-2 al equipo dirigido entonces por Marcelo Bielsa. “Fue un gol de chilena y no se me va a olvidar por el estadio en el que fue, por el rival y porque fue el primero que metí con la camiseta del Getafe”, recuerda más de una década después el punta barcelonés, que ha jugado dos partidos en la vieja Catedral y tres en el nuevo San Mamés, uno de ellos en diciembre de 2014 en un Euskadi-Catalunya “con el campo a rebosar en otra experiencia bonita”.
“Cuando jugué en el viejo San Mamés eran mis primeras temporadas en Primera División tanto con el Espanyol como con el Getafe y era un campo muy especial con mucha historia detrás. La gente estaba muy cerca del banquillo y de la zona de calentamiento y había un ambiente de los que es difícil encontrar ya en el fútbol español”, destaca Álvaro Vázquez, quien agrega que “el nuevo campo es imponente y me tocó vivirlo nuevo, recién estrenado. Es espectacular, nada que ver con el antiguo al ser mucho más bonito, pero el ambiente y el aura del antiguo San Mamés era otra cosa”.
Diecisiete goles y cuatro asistencias firmó el ahora jugador del Arenas en sus 81 partidos con el Espanyol, el equipo que “me ha dado la oportunidad no solo de jugar en Primera y convertirme en futbolista profesional, sino de hacerme como persona e inculcarme unos valores desde que era muy pequeño”. Recuerda con cierto amargor Álvaro Vázquez su primera salida del club periquito, pues “negociaron con bastantes equipos mi venta al estar la entidad en una situación económica un tanto mala y en esa negociación ellos tenían unos impagos hacia mí, por lo que siendo todavía jugador del Espanyol tuve que formular una denuncia con la Asociación de Futbolistas Españoles (AFE) para asegurarme ese cobro”.
“Hubo malos entendidos, el club echó a la gente encima y al final acabó pagando un traspaso el Getafe en los últimos días de mercado. Fue todo un poco convulso, pero cuando las cosas se hablan la gente lo entiende con el tiempo y cuando volví después al Espanyol la gente no lo tuvo en cuenta”, recuerda el delantero, que tras su segunda salida del club blanquiazul se enroló en las filas del Nàstic. Pasó después por el Zaragoza, Sporting de Gijón, Sabadell, Kerala Blasters y Goa de la India, Ponferradina, Linares y Badalona, estación previa a su desembarco el pasado verano en el Arenas, equipo con el que se mide hoy al Talavera en Gobela a partir de las 12.00 horas.
No estará hoy en San Mamés
Pendiente del Espanyol continúa Álvaro Vázquez, quien a sus 34 años de edad ve en la actualidad un cuadro blanquiazul “muy entero, compacto y unido. Están a nada de hacer más puntos que al término de la temporada pasada, el trabajo es muy bueno y todo esto es gracias al entrenador”.
No podrá estar mañana en San Mamés Álvaro Vázquez, dado que “vivo en Donostia y me pilla un poco lejos. Al estar ya de vacaciones no tendré tiempo, pero veré el partido”. El catalán, que afronta esta mañana en Gobela (12.00 horas ante el Talavera) el último compromiso de los rojinegros en 2025, entiende asimismo que “el Espanyol está en muy buena posición en la tabla y con mucha confianza. Vienen de no competir en Copa, ni en Europa y el Athletic puede llegar con un mayor desgaste físico y emocional, pero en casa es un hueso duro. Puede pasar cualquier cosa en el partido, aunque quiero que gane el Espanyol para que acabe el año lo más feliz posible”.
“Nico Williams le da muchísimo al Athletic y por parte del Espanyol me quedaría con Kike García o Roberto, porque están en un momento dulce y todo lo que tocan lo convierten en gol, por lo que pueden ser peligrosos”, finaliza su análisis Álvaro Vázquez, un perico con nido en Bizkaia y buenos recuerdos de San Mamés.