Queda mucha tela que cortar aún en la Europa League, puesto que el Athletic está a las puertas de jugar los cuartos de final ante el Rangers. Es decir, el cuadro está lejos de resolverse; pero ya hay una cosa clara: la final tendrá lugar en San Mamés el próximo 21 de mayo. Y con eso, a la UEFA le vale para lanzar la venta de entradas del partido más importante de su segunda competición.

Así, cabe destacar que las solicitudes se gestionarán exclusivamente a través de la plataforma del organismo del fútbol europeo (UEFA.com/tickets) y que el plazo para mandarlas acaba el viernes 11 de abril a las 11.00 horas. De igual forma, la UEFA indicó que, tal y como viene desarrollando en años anteriores, para la final de San Mamés "las entradas para el público general no se venderán por orden de llegada, sino mediante un sorteo que se realizará una vez finalizado el pazo de solicitud".

15.000 entradas para cada finalista

La UEFA también informó que la mayoría de las entradas para la final de la Europa League se "asignarán a los aficionados de los clubes participantes y el público general". Asimismo, los asientos disponibles en la categoría más económica estarán exclusivamente reservadas para los seguidores de los dos equipos finalistas.

Hablando de cifras concretas, de los 49.600 asientos disponibles en San Mamés, 41.000 se pondrán a la venta para la compra directa de simpatizantes de los dos finalistas: "Las entradas restantes, fuera de estas asignaciones, se destinarán a la estructura organizadora local, las federaciones nacionales miembros de la UEFA, los socios comerciales, los difusores y la propia UEFA", dijo el organismo en su comunicado.

Entre 40 y 240 euros

Asimismo, cada equipo recibirá 15.000 entradas, cuyos precios oscilarán entre los 40 y los 240 euros. Aunque ascenderán hasta los 650 si se quiere -y puede- presenciar el partido desde la zona VIP de La Catedral.

Sin embargo, tal y como indicó la UEFA, tanto el proceso de venta como la asignación de estas 15.000 entradas serán gestionados directamente por los clubes. Es decir, en caso de que el Athletic llegue a la final de la Europa League, será la misma entidad rojiblanca quien decida cómo resuelve las solicitudes de su masa social.