El partido entre el Fenerbahce y el Athletic que se disputa esta tarde en Estambul ha dejado una previa sin ningún tipo de incidentes. Los poco más de 900 aficionados rojiblancos desplazados al país otomano se han dejado ver por los lugares de mayor interés turístico de la inmensa ciudad y ha recorrido sus calles sin mayores problemas. De hecho, se han fotografiado con numerosos hinchas locales.
El problema ha estado al llegar al estadio. Después de citarse la mayoría de ellos en la zona europea para ser trasladados desde allí en unas lanzaderas hasta la zona asiática, donde se ubica el Sukru Saracoglu, varios aficionados se han encontrado con que no les han dejado introducir sus ikurriñas al interior del estadio.
Solo banderas españolas
La seguridad del club turco ha alegado que únicamente se podían meter banderas de España, aunque en un primer momento ha parecido más bien una decisión aleatoria, toda vez que sí ha habido otros aficionados del Athletic que han pasado los controles de seguridad con sus ikurriñas. Estos últimos luego han visto cómo se las requisaban sentados ya en sus localidades.