La desaparición de Iñigo Lekue, el comodín de la zaga

Existe una competencia más o menos acusada en cada una de las demarcaciones y el baile de nombres, propiciado por la densidad del calendario, ha llevado a concluir que el entrenador maneja una nómina más amplia que en campañas anteriores. Apreciación que no se sostiene al menos en lo cuantitativo, pues el año pasado Valverde llegó a utilizar hasta 28 futbolistas, uno más que los empleados desde agosto. De ese grupo, nueve ya no están en Lezama, dato compensado con la aparición de ocho caras nuevas: Gorosabel, Djaló, Adama, Nico Serrano, Nuñez, Padilla, Martón y el ya citado Canales.

De momento, ninguno de los recién llegados se ha hecho un sitio entre los titulares. No obstante, en algunos puestos concretos empiezan a notarse dinámicas diferentes porque el reparto de oportunidades está siendo otro. Esto es evidente en los laterales y quien sale perjudicado es Iñigo Lekue. Ocurre que Valverde continúa confiando en los veteranos De Marcos y Yuri Berchiche, pero a la hora de las alternativas se está decantando por Gorosabel y Adama.

No fue así en el arranque de la temporada, pero con el discurrir de las semanas se comprueba nítidamente cómo está apostando por los cuatro hombres mencionados, mientras que Lekue permanece atado al banquillo. Cabe que la situación experimente alteraciones más adelante, pero hay un dato demoledor: pese a figurar en la totalidad de las convocatorias, Lekue acumula ocho encuentros consecutivos sin jugar. En dicho tramo, nadie más ha permanecido inédito. Cualquiera de los 23 futbolistas restantes ha tenido minutos, también quienes apenas han contado, como Martón o Nico Serrano.

Era previsible que la captación de Gorosabel fuese en detrimento de las opciones de Lekue, pero no estaba tan claro que Adama le adelantase en las preferencias de Valverde. Con Gorosabel se buscaba un recambio para De Marcos y tal es la función que desarrolla. Ambos se van intercambiando en el costado derecho, medida que pretende evitar el excesivo desgaste del elemento más veterano de la plantilla y, de paso, afianzar al guipuzcoano en el equipo pensando en un futuro cercano.

Adama representaba una incógnita dada su condición de novel en la categoría. De los cinco laterales específicos, es quien menos veces ha salido al campo, cinco nada más, pero en cuatro ha sido titular en el sitio de un Yuri que ya ha superado el millar de minutos, repartidos en catorce citas, doce de inicio.

La estadística sitúa a Lekue como el quinto lateral en la actualidad, con solo 316 minutos, y por lo apuntado, con visos de no progresar. Un panorama que no se auguraba en las primeras jornadas, pues gozó de dos titularidades y en otros dos partidos entró en la segunda parte, siempre en la derecha. No jugó en las dos jornadas siguientes y sustituyó a Adama en la séptima a falta de media hora escasa para la conclusión. En el Olímpico de Roma, el bilbaino no se quitó el chándal y frente al Sevilla, a finales de septiembre, fue titular en el ala izquierda. Ahí concluye su recorrido. Luego y hasta la fecha, sus cuatro compañeros han monopolizado la totalidad de los minutos.

Quizá lo llamativo de la radical desaparición de Lekue sea el notable rendimiento que ofreció en el curso 2023-24. Se erigió en la gran solución para compensar las ausencias de De Marcos y Yuri. Sumó tantos minutos como el segundo (2.446) y solo 200 menos que el primero. Fue doce veces titular en la derecha y catorce en la izquierda, incluso ejerció de central en un encuentro. Servicios que ahora parecen haber caído en el olvido.