Iñaki Williams ha puesto fin a una ventana FIFA poco fructífera para la selección de Ghana, que se impuso por 3-1 a Liberia el pasado jueves, pero que ha encajado dos derrotas consecutivas ante rivales de mayor entidad, la primera contra México el pasado sábado, cuando los ghaneses cayeron derrotados por 2-0, y la segunda en la madrugada de ayer a hoy, con una goleada de 4-0 frente a la selección de Estados Unidos en un partido disputado en el Geodis Park de Nashville.
Williams ejerció como titular frente al combinado estadounidense para disputar 75 minutos en los que dio continuidad a su sequía goleadora con la camiseta de la selección africana, con la que ha disputado ya once compromisos sin ver portería. Cierto es que el rival fue arrollador. Estados Unidos consiguió sus cuatro goles en la primera parte del encuentro, concretamente en los 39 minutos iniciales. Un duro varapalo que se suma al sufrido contra México, cita en la que el delantero del Athletic solamente disputó la media hora final. Además, contra Liberia se mantuvo en todo momento como suplente en el único triunfo de este parón liguero.
De este modo, Williams regresa a Lezama con un sabor amargo. Cierto es que sus poco más de 100 minutos de juego en los tres partidos de Ghana hacen que la exigencia física en este parón de selecciones haya sido relativa. Aunque por otra parte, además del posible impacto del jet-lag’–el partido contra Liberia fue en Ghana y para los otros dos tuvo que viajar al otro lado del Atlántico–, se incorporará a las órdenes de Ernesto Valverde sin apenas margen para preparar la reanudación de la liga este domingo contra el Barcelona en Montjuic.
