Buscaba revancha el Athletic en El Sadar y la encontró en el apartado colectivo e individual. “El afán de revancha siempre es bueno”, manifestó Ernesto Valverde en Lezama en la previa del derbi de anoche y no se equivocó. Dicho y hecho. El objetivo de inaugurar en Iruñea el casillero de puntos con tres de una tacada se consumó en un estadio en el que Osasuna amargó la existencia a los rojiblancos la pasada temporada por partida doble. En liga y Copa vencieron como locales los de Jagoba Arrasate para erigirse al término del curso en la bestia negra de los leones en ambas competiciones.
Temporada nueva, vida nueva. A eso se agarró el Athletic para cantar bingo gracias a los goles de Iñaki Williams y Gorka Guruzeta. Ambos asistidos por un iluminado Nico Williams que se tomó su particular revancha frente a Osasuna. Primero con un preciso centro desde el costado izquierdo y después con una brillante acción individual puso en bandeja de plata sendos tantos tras ser señalado tras el partido de vuelta de la semifinal de Copa del pasado ejercicio por no materializar dos claras ocasiones de gol que pudieron cambiar el signo de la eliminatoria. Desacertado en la definición, el menor de los Williams recibió toda clase de críticas e incluso insultos en las redes sociales, lo que le impulsó a cerrar momentáneamente sus perfiles en Instagram y Twitter.
El navarro cerró sus perfiles en las redes sociales por los insultos recibidos tras sus fallos de cara a gol en la semifinal copera
“Me fui jodido a casa, no le deseo a nadie lo que me pasó a mí", llegó a declarar Nico, quien señaló en relación a la avalancha de ofensas que sufrió por parte de algunos aficionados que “estas cosas no deberían pasar y menos en el Athletic, que es una gran familia con una gran afición". “No todo vale”, sentenció el club a través de un comunicado para salir en defensa del navarro, mientras que Iñaki, transcurrido prácticamente un mes, afirmó que su hermano no tenía que dudar de sí mismo “porque cuatro anormales se metan con él y las cosas que le han hecho llegar hasta aquí son las que tiene que seguir haciendo”. Consejo de hermano que Nico siguió a rajatabla y que puso de manifiesto este sábado en El Sadar tras arrancar la temporada con mal pie en San Mamés.
Sustituido tras el descanso ante el Real Madrid, el internacional rojiblanco reaccionó de inmediato para recuperar su mejor versión. Lo hizo, como le advirtió su hermano, en ese proceso de aprender a manejar las emociones justo después de recibir otra ración de críticas por escribir en la noche del viernes un mensaje de apoyo en Twitter a la selección española femenina de cara a la final del Mundial del domingo contra Inglaterra. Incisivo y acertado en el uno contra uno por banda izquierda, Nico amargó la noche a Rubén Peña y fue uno de los leones más destacados del encuentro.
Sustituido tras el descanso ante el Real Madrid, Nico recuperó anoche su mejor versión en un señalado encuentro frente a Osasuna
Trabajo cumplido
La actuación del navarro tocó a su fin en el minuto 65 como consecuencia directa de la expulsión por doble amonestación de Oihan Sancet. En inferioridad numérica Valverde se vio obligado a variar el plan y sustituyó a Nico por Alex Berenguer en un doble cambio que incluyó la entrada de Ander Herrera por Gorka Guruzeta. Se fue con los deberes hechos el menor de los Williams.
