El Athletic, por medio de su director de fútbol, Mikel González, y el máximo responsable de Lezama, Sergio Navarro, ha hecho balance de lo acontecido en Lezama a lo largo de la temporada 2022-23, con mención especial a lo sucedido con el Bilbao Athletic, que tras una campaña para olvidar confirmó semanas atrás su descenso a Segunda RFEF. En una sala de prensa de Lezama abarrotada, en la que el club ha exhibido músculo, pues sus dos máximos responsables deportivos han estado acompañados por el presidente, Jon Uriarte, varios miembros de la Junta Directiva, así como por el director general del club, Jon Berasategi, González ha hecho autocrítica y Navarro ha asumido el error de apostar por Bingen Arostegi, primero, y Álex Pallarés, después, para dirigir al primer filial rojiblanco.

El grueso de la comparecencia, al margen de los datos expuestos sobre el método de trabajo así como las distintas acciones llevadas a cabo en Lezama, se ha centrado en cuestiones relativas al Bilbao Athletic, equipo que el próximo curso estará dirigido por Carlos Gurpegi, el técnico por el que suspiraron antes de contratar finalmente a Bingen Arostegi y al que en plena caída del filial, con Pallarés incapaz de hacer nada por salvar al filial, no quisieron quemar.

Mikel González ha arrancado la exposición haciendo autocrítica y asumiendo que determinadas cosas se podían haber hecho mejor. “Puede haber cierta inquietud sobre la situación del Bilbao Athletic. Nos gustaría iniciar esta rueda de prensa con una autocrítica. Somos los primeros que no estamos contentos con la temporada, con cómo se ha ido desarrollando, qué resultados hemos obtenido. En el proceso de la temporada ha habido momentos de alguna equivocación y unos errores que hemos cometido”, ha expuesto.

Dentro de esos errores, tal y como ha admitido Sergio Navarro, se encuentran las apuestas por Arostegi y Pallarés: “Me equivoqué al plantear y al replantear esos nombres. No porque no sean buenos entrenadores, sino por un contexto de trabajo. El aprendizaje no es en línea recta. Tanto Bingen como Pallarés tendrán éxito en sus carreras deportivas. Han trabajado día y noche por cada uno de los chicos. Hay que reconocer que nos hemos equivocado en la elección de estos entrenadores”.

Cuestionados sobre los motivos por los que decidieron no cesar al entrenador catalán cuando el descenso estaba ya encaminado para el filial, Mikel González ha apuntado que le vieron “con fuerza”. “Si no le hubiésemos visto con fuerza, trabajando en el día a día y pensando que se podía lograr el objetivo, habríamos tomado otro tipo de medidas”.

LOS JUGADORES

Lejos de reprocharse más errores, el director de fútbol del Athletic ha asegurado que lo más importante en Lezama es el jugador: “En todo este proceso para nosotros el resultado es el jugador, es nuestro producto, nuestra estrella. Y en base a eso trabajamos al 100%. Pensando en futuro y en la solidez del club, tenemos que ser capaces y vamos a ser capaces de conseguir el 100% del rendimiento de estos jugadores”.

En esta línea, Navarro ha defendido que, pese al descenso del Bilbao Athletic, un equipo que únicamente ha ganado cinco partidos en liga, los futbolistas “no han involucionado, al revés”.