Marcelino: "El balance es muy bueno"

El primer partido, ante el Sankt Gallen, fue un toque de atención. Tras la derrota por 2-1 con una pobre imagen, el asturiano identificó la fragilidad defensiva a la hora de afrontar jugadas de estrategia de los rivales como una cuenta pendiente. El balón parado fue una condena. Ocurrió el sábado, día 17, un día después de aterrizar en Suiza. Sucedió ante un conjunto que se clasificó en la séptima plaza de la Superliga suiza, que cuenta con diez equipos.

El Athletic demostró además una lógica baja forma física ante un equipo que estaba a solo unos días de iniciar la competición. También se pudo detectar falta de fluidez en el juego. A los leones les pesaban las piernas y la mente estaba agarrotada. Dani García aludió a la alta carga de trabajo que arrastraba la plantilla de los días previos de ejercicio en Lezama, donde hubo hasta tres sesiones de entrenamiento al día como posible explicación de la pesadez. El tropiezo ante el Sankt Gallen era una alerta. Los siguientes rivales, al menos en cuanto a nombre se refiere, se antojaban de mayor nivel.

Lo cierto es que solo tres días después, el martes 20, la tropa bilbaina dio un importante cambio de imagen. La debilidad defensiva se convirtió en solidez y desde esa virtud el equipo secó al Dinamo Kiev (1-0), otro conjunto más rodado, pero que no generó ocasión clara alguna. El Athletic no fue una oda a la creatividad, pero mejoró en líneas generales y logró hacer justicia con un gol de Iñaki Williams. De nuevo un Williams participaba en el resultado, porque ante el Sankt Gallen, Nico propició con un centro suyo el tanto en propia meta del cuadro suizo.

La progresión se hizo más evidente contra el Borussia Dortmund, el sábado 24. El equipo movió la pelota con criterio, quizá con cierto atoramiento en la zona de los tres cuartos del campo, donde hubo acciones condicionadas por la dudas. El equipo pecó mostrándose dubitativo en la toma de decisiones del último pase o las finalizaciones. Pero los leones movieron el balón y el gran trabajo colectivo se sobrepuso a los males. El Athletic generó ocasiones y Raúl García y Vivian firmaron las dianas. Fue una brillante actuación desde el prisma grupal. El equipo volvió a ser férreo y de nuevo maniató a un rival con poderosos argumentos ofensivos. Haaland fue una anécdota.

manda el colectivo

Durante la concentración no ha habido jugadores especialmente destacados por las individualides. Si acaso Sancet o Nico Williams han dejado alguna acción ilusionante. También Nico Serrano o Vivian han proyectado detalles de calidad en cuanto a los jóvenes se refiere. Pero por encima de todo ha estado el equipo. Y así lo aplaude Marcelino.

“El balance es muy bueno”, valora el técnico, que durante el stage ha resaltado con constancia la entrega del vestuario. “Veo una actitud muy buena de trabajo, una predisposición absoluta a hacer aquello que trabajamos y como queremos jugar”, destaca. “Es lo que me satisface”, afirma. Porque a pesar de las dos victorias ante equipos de Champions League, Marcelino resta importancia a los resultados en esta fase de preparación. “No llevan a ningún lado”, proclama.

En este sentido, asegura que, con independencia de los resultados -los cuales de ser negativos asegura que no minarán la moral-, “vamos a insistir en aquello que hacemos bien, porque además nos refuerza, y es importante que contra equipos buenos seamos capaces de desarrollarlo”.

A su juicio, “lo mejor, sin duda”, de este stage. Mientras, lo más negativo entiende que son las lesiones. “Aunque no son de mucha importancia, sí que nos cortan un poco el ritmo y con jugadores que deben ser importantes”. “Hemos tenido la baja de YuriCualquier futbolista que no entrena es lo que más te preocupa. Afortunadamente también hasta ahora son temas leves”, señala.

En el caso de Yeray, la posible preocupación se debe a que “ya tuvo más molestias de este tipo, en ese mismo punto, al final de la temporada pasada”. Si bien, el técnico dice que la lesión producida ante el Borussia Dortmund fue debido a la “mala suerte, porque fue un acto donde le quedó la pierna atrás”. El míster es optimista: “Parece que el dolor no fue persistente y ahora está mucho mejor, así que creemos que va a seguir así”.

Por todo ello, Marcelino concluye la concentración con un sabor dulce, dado que la imagen ofrecida ha sido positiva y considera que a estas alturas de la pretemporada hay margen de mejora gracias a esa actitud de querer seguir progresando. El próximo reto: este sábado el Union Berlín.

La actualidad

El público vuelve hoy a lezama

152 personas por entrenamiento. El Athletic abrirá hoy, casi un año y cinco meses después, una sesión de trabajo del primer equipo para sus aficionados. En la tercera sesión de entrenamiento del día, que arrancará a las 18.30 horas, un máximo de 152 personas podrán seguir en directo las andanzas de los pupilos de Marcelino García Toral. El técnico asturiano, que llegó a Bilbao el pasado mes de enero, vivirá su primera toma de contacto con la parroquia rojiblanca, ya que desde su fichaje no ha podido dirigir ningún encuentro con público, tampoco ninguna sesión de entrenamiento. El club ha habilitado una dirección de mail para que los socios, que podrán acudir con hasta dos acompañantes, se apunten para presenciar la sesión de esta tarde.

“Lo mejor es la progresión, la actitud y hacer las cosas como colectivo y confiar en lo que se plantea”

Entrenador del Athletic