El Campeonato de Parejas cose a los pelotaris creando siameses durante, por lo menos, catorce semanas. Si hay éxito, la unión se alarga hasta las 20. Mikel Urrutikoetxea (Zaratamo, 1989) y Ander Imaz (Oiartzun, 1994) afrontan el torneo con intención de llegar hasta el final. Entretanto, el vizcaino, del Athletic, y el guipuzcoano, de la Real Sociedad, pueden vivir una final de Copa inédita entre los equipos de fútbol de sus amores. Lo harán con "rivalidad sana" y seguros de que caerán "muchas vaciladas". "Es un momento de disfrutar", concuerdan.

Va a ser una final histórica.

—ANDER IMAZ: Es una final entre dos equipos vascos que no vamos a volver a ver en mucho tiempo. Quizás no la vivamos nunca más. Aprovecharé para disfrutar de ella en casa, por televisión.

—MIKEL URRUTIKOETXEA: Es una situación muy especial, ya que se trata de dos equipos vascos. Además, hay rivalidad sana entre las dos aficiones, es un derbi y se vivirá un ambiente muy especial. Seguramente, como Ander, la veremos desde casa si ese día tenemos libre. Espero un buen encuentro y que gane el Athletic, por supuesto.

—A. I.: Y yo, que gane la Real. Cada uno tiene sus gustos, pero es una competencia sana. Es una pena que no se pueda ver la final en directo en La Cartuja y acudir a Sevilla, porque habría un ambiente muy especial.

Caerán WhatsApps al terminar el partido.

—M. U.: Seguro.

—A. I.: ¡Y durante! Bueno, si va bien la cosa; si no, igual quito los datos del móvil (risas).

—M. U.: Algo caerá, pero en este caso lo que tiene bueno el Athletic es que dispondrá de dos finales seguidas. Quieras o no, si se pierde una, tienes la otra. Aun así, sería importante ganar la de la Real.

Si tiene que elegir una, ¿cuál sería?

—A. I.: ¡Venga, Mikel! ¡Mójate!

—M. U.: Las dos tienen el mismo valor, pero si tengo que decantarme por una, preferiría ganar contra la Real. Sobre todo, por esa rivalidad que hay entre los dos equipos.

En el caso de la Real Sociedad, Ander, solo tiene una bala en la recámara. Hay que salir a por todas.

—A. I.: Es uno de los encuentros más importantes que va a haber para los dos. Este partido puede marcar lo que vendrá en los próximos años: el que gane, tendrá mucho ganado; el que pierda, llevará una losa encima.

Y puede determinar las vaciladas entre las dos aficiones.

—A. I.: ¡Es que se la vas a quitar al vecino, a tu máximo rival! Los aficionados lo vamos a vivir con intensidad, desde luego.

Imagínese aguantar a los guipuzcoanos de la plantilla, Mikel.

—M. I.: ¡Por eso lo digo! (Risas). No me imagino todo lo que nos tocaría vivir en los vestuarios.

¡Cualquiera se pone la camiseta del perdedor la semana siguiente!

—A. I.: El que pierda no tendrá muchas ganas de ponérsela, no. Aun y todo, hablando más en serio, se trata de un partido muy bonito y tenso, pero que gane el mejor.

—M. U.: Sin duda. Las dos plantillas están en un buen momento de juego y en el fútbol, como en el resto de deportes, se juega todo a una sola carta; en este caso, en 90 minutos o 120, si hay prórroga. Puede pasar cualquier cosa.

En su caso están inmersos en el Parejas y les está tocando pasar mucho tiempo juntos. Según llegue momento supongo que vivirán también con ilusión los días previos.

—M. U.: Sí. Está claro que mucha gente lo vivirá con intensidad.

—A. I.: Durante la semana comentamos todo lo que sucede en la actualidad y esos días nos tocará hablar del derbi, de fútbol, nos vacilaremos y estaremos pendientes de ese partido. Alguna broma ya caerá.

En el vestuario de Baiko hay once guipuzcoanos (Alberdi, Albisu, Aranguren, Arteaga II, Artola, Elizegi, Erasun, Imaz, Peña II, Urretabizkaia II y Zubizarreta III) y solo cinco vizcainos (Aretxabaleta, Ibai Zabala, Larunbe, Uriondo y Urrutikoetxea; Bengoetxea VI, navarro, también es simpatizante rojiblanco). ¿Empieza a haber algo de ambiente?

—A. I.: ¡Por eso quiere ganarnos! ¡Porque estamos más de la Real que del Athletic! Ya pueden ganar, porque si no€

—M. U.: Eso es. Aunque hay que reconocer que vivimos una rivalidad sana. Esa semana del partido seguramente habrá muchos comentarios.

—A. I.: Lo que es seguro es que son unos días para disfrutar. Tanto la Real como el Athletic hemos dejado fuera de la competición a grandes equipos, incluidos el Real Madrid y el Barcelona. Al empezar seguro que nadie daba un duro por nosotros. Es muy difícil conseguir llegar hasta aquí y tendremos que pasarlo bien.

—M. U.: Pase lo que pase al final tenemos que tener esa mentalidad: son partidos especiales que se tienen que valorar y disfrutar. No es fácil alcanzar una final, pero es deporte y puede pasar cualquier cosa. El que gane estará loco de contento, pero el que pierda debería de estar feliz por haber llegado tan lejos. Es un partido impredecible.

La Real alcanza la final de Copa después de 33 años. ¿Cómo se ve este partido desde Gipuzkoa?

A. I.: Es la oportunidad. Tuvimos años buenos, pero hace mucho tiempo que no ganamos ningún título. Tenemos un buen equipo, como el Athletic, y se nota que hay ilusión por hacer algo bonito.

Mójense. ¿Un resultado?

—A. I.: Gana la Real 2-1. Marcarán Isak y Oyarzabal.

—M. U.: Espero que sea un 2-0 para el Athletic. Ojalá metamos un gol en cada parte y así poder vivirlo con mayor tranquilidad. Me gustaría que marcaran Villalibre y Raúl García y que sacaran la trompeta. Así haremos la celebración completa.

¡Solo queda que se jueguen algo, aunque sea un café!

—A. I.: Estoy dispuesto, porque no voy a perder.

—M. U.: Algo nos apostaremos, seguro. Tendremos que pensar qué le quitamos a Ander (risas).

"Las dos Copas tienen el mismo valor, pero si tengo que decantarme, preferiría la de la Real"

Pelotari del Athletic

"Ganar el título significa quitárselo al vecino. Los aficionados vamos a vivirlo con intensidad"

Pelotari de la Real Sociedad