El Athletic femenino ve poco a poco la luz tras el positivo por covid-19 detectado en su plantilla y que ha trastocado los planes de Iraia Iturregi. Tras tener que aplazar sus dos últimos compromisos de liga ante el Barcelona, en Lezama, y frente al Betis, en la capital andaluza, las rojiblancas entrenan ya en un amplio grupo para recibir este domingo al Espanyol (12.00 horas), un duelo de vital importancia para las leonas, que acumulan once partidos sin ganar, la peor racha de su historia.

Según ha indicado el club, tras pasar los contactos estrechos el periodo preventivo de cuarentena, Iturregi dispone ya del grueso de la plantilla con la excepción de Ainhoa Moraza, que permanece en su domicilio aislada en buen estado de salud tras dar positivo por coronavirus el pasado 24 de enero. Además de la baja de Moraza, la entrenadora de Loiu tampoco podrá contar para el próximo encuentro con Ane Azkona, Erika Vázquez y Jone Ibáñez, esta última por unas molestias en el cuádriceps.

NO GANAN DESDE EL 5 DE NOVIEMBRE

Tras entrenar con muy pocos efectivos la pasada semana, el Athletic prepara además de la cita ante el Espanyol, el partido ante el Madrid CFF, que se disputará el próximo miércoles en el campo de Matapiñonera, en San Sebastián de los Reyes. El equipo bilbaino ocupa la décimo segunda posición en la Primera Iberdrola y necesita imperiosamente una victoria para coger algo de moral, ya que no gana desde el 5 de noviembre. Iraia Iturregi, que cogió las riendas del primer equipo rojiblanco el pasado 7 de enero tras la destitución de Ángel Villacampa, aún no conoce el triunfo (perdió 0-1 ante el Eibar y empató a dos goles frente al Santa Teresa, con gol en propia puerta en contra en los últimos instantes).