El duro e inesperado resultado en las urnas que sufrió la Junta Directiva en la Asamblea General del domingo, con el rechazo a las cuentas del ejercicio 2019-20 y de los presupuestos 2020-21 de casi un 60% de los socios compromisarios, no ha provocado ningún terremoto ni nada por el estilo, no al menos del que se haya tenido constancia, en el equipo de gobierno del Athletic que preside Aitor Elizegi. Las 16 personas que componen actualmente la Junta, formada por 17 hasta la dimisión de María Tato para emprender una nueva etapa en la Real Federación Española de Fútbol (RFEF), se reunieron minutos después de conocer los resultados de las distintas votaciones de la asamblea en el propio campo de San Mamés para realizar una primera valoración de lo acontecido y, tal y como reconoció ayer el máximo dirigente del club, nadie mostró su intención de dimitir. Al contrario, el de Santutxu apeló a la "unidad" de su equipo de trabajo.

Nada que ver con la imagen proyectada tras el caso Llorenteen el último día del mercado de verano y semanas después con la famosa reunión celebrada también en La Catedral en la que se debatió la continuidad de Gaizka Garitanoal frente del primer equipo rojiblanco. Entonces, a través de distintas publicaciones en los medios, se hizo ver una división entre los miembros de la Junta. Algo que, atendiendo a las palabras de Elizegi, no sucedió el domingo. "La respuesta es clara. No, en absoluto", negó categóricamente el presidente cuando fue cuestionado sobre dicha posibilidad.

"He dado las gracias, he remarcado la sensación de unidad, de sosiego y de responsabilidad que encontré en estas quince personas. De calma. Lo que me transmitieron fue club, Athletic. Han tenido dos momentos muy complejos durante nuestro trabajo. Uno fue tomar la responsabilidad cuando no teníamos más que declaraciones sobre algo tan lejano como un consejo de ministros, sobre una posible o no, y sin embargo la Junta dio un paso adelante clarísimo, firme. Me parece una decisión de responsabilidad máxima, poniendo la provisión, el club por delante de sus intereses. Yo aquel día fui a casa de nuevo reconfortado, creyendo en el Athletic y en mis directivos. Y ayer -en por el domingo-, de nuevo. Cuando todo el mundo primero Athletic, segundo Athletic y tercero Athletic. Tampoco esperaba otro mensaje".

Admitió, que llevaban "algunos errores en la mochila", de ahí que tengan que pasar por un "necesario proceso de autocrítica", no ocultó que "el rechazo a las cuentas y el presupuesto fue importante" pero quiso defender "muchos de los proyectos de la Junta que transcienden a este proyecto".

Además, se mostró seguro de que "las dudas deportivas" del equipo tampoco les han ayudado, aunque puso en valor que anteponen los intereses "del Athletic por delante cada día" y durante uno de los instantes, casi al final de su extensa comparecencia ante los medios para realizar una análisis de lo que fue la Asamblea General del domingo, Elizegi deseó lo siguiente: "Ojalá nadie tenga que gobernar en pandemia".

PRESUPUESTOS

¿Qué pasará con Laliga?

De momento, a la espera. Aitor Elizegi no pudo avanzar nada de lo que pasará con LaLiga después de que la Asamblea General le echara para atrás las cuentas y los presupuestos. "Me coges sin la preparación técnica suficiente", se disculpó antes de apuntar lo siguiente: "La parte del cierre contable sí nos parece básica, la palabra firmada de un club de la entidad del Athletic. Y queremos ser profesionales, certeros, porque la imagen en LaLiga, la Federación y el CSD tiene que ser básica. En cuanto a la estrategia presupuestaria, según terminemos empezaran días de autocrítica, escucha y reflexión sobre el presupuesto".