- La vuelta a los entrenamientos en las instalaciones de Lezama ha dado el pistoletazo de salida a una renovada lucha interna por hacerse un hueco en los planes inmediatos de Gaizka Garitano, quien podría verse abocado a modificar su once tipo en caso de que la preparación física y psicológica de sus jugadores invite al cambio. Titulares y suplentes habituales pugnan de nuevo, todavía de manera individual, por mantener o recuperar roles que volverán a salir a concurso de cara a la recta final del curso, tramo con marcada acumulación de partidos que encara con la condición de titular Unai Simón (Murgia, 11-VI-1997), consolidado bajo palos en una campaña en la que ha superado la competencia de Iago Herrerín (Bilbao, 25-I-1988).

La situación de ambos, con once jornadas de liga por delante para poner el punto final a un ejercicio llamado a relanzarse a un mes vista, no pude ser más desigual. Mientras que el murgiarra asoma como el tercer guardameta con mayor porcentaje de paradas en el campeonato con un 72,22%, superado solo por el madridista Thibaut Courtois (74,19%) y el levantinista Aitor Fernández (74,84%), el bilbaino podría estar a las puertas de sus últimos compromisos como rojiblanco tras siete temporadas como león. Gorka Iraizoz, Kepa Arrizabalaga y Unai Simón, por último, han apartado de la portería a un hombre que solo pudo desgastar sus guantes el pasado curso y que ya ha dejado la puerta abierta públicamente a un posible cambio de aires al término de la presente edición liguera.

A pesar de renovar su contrato en enero de 2018 hasta el 30 de junio de 2021, Herrerín confesó en marzo en una entrevista concedida a Onda Vasca que ni al principio de temporada, ni en el último mercado invernal dio el Athletic el visto bueno a una salida que bien pudo producirse, dado que “tenía claro que tenía que salir, quería hacerlo y hubo ofertas, pero tampoco me dejaron”. Así se refirió a su situación personal el bilbaino, que suma tres partidos de liga y cuatro de Copa esta campaña, en la que su expulsión en la cita de octavos de final del torneo del K.O. contra el Tenerife le costó el puesto en una competición que se presumía para él.

los números También ahí, en una Copa con sabor especial para los leones, ganó la partida Simón, quien se encontraba, incluso, en la agenda de Luis Enrique para acudir a una Eurocopa aplazada por la pandemia. Los números y las sensaciones ofrecidas por el de Murgia, no en vano, eran sobresalientes hasta el parón. Ni siquiera las paperas que le fueron diagnosticadas el 11 de enero, en la previa del compromiso copero frente al Sestao River en Las Llanas y que le mantuvieron fuera de combate durante tres semanas, frenaron la imparable progresión de un joven, pero seguro y sólido guardameta, que se mantiene en plena lucha por el trofeo Zamora con Courtois y Oblak.

Los tres figuran con coeficientes sumamente igualados, si bien Simón supera al colchonero en porcentaje de partidos con la portería a cero al lograrlo en diez de las veinticuatro ocasiones que había posado bajo palos. En once encuentros lo logró antes de la detención del campeonato Oblak, pero con tres apariciones más de las que acumuló el rojiblanco a la espera de poder dar continuidad a una brillante temporada en la que su felicidad contrasta con lo “duro” que está siendo el año para Herrerín. Ambos, no obstante, vuelven a poner ahora sobre la mesa sus respectivas cartas en beneficio del colectivo y con el objetivo de finalizar con las mejores sensaciones posibles un ejercicio que podría dar paso a un nuevo escenario en la portería del Athletic. Así será en caso de que el bilbaino haga las maletas en busca de un nuevo destino y otro portero, quién sabe si Aitor Fernández, aterriza en San Mamés con Jokin Ezkieta y Hodei Oleaga, a las órdenes de Garitano en la actualidad, en la recámara.