Lezama - Ibai Gómez pisará este domingo (14.00 horas/Gol) el césped de Mendizorrotza por primera vez desde que abandonó Gasteiz para comenzar su segunda etapa en el Athletic. Pero no lo hará desde el panorama deseado puesto que esta temporada está teniendo muchos menos minutos de los que esperaba. De hecho, en anteriores comparecencias ante la prensa, el jugador bilbaino pidió más oportunidades a un Gaizka Garitano que parece tener muy perfilado su once habitual. "Mi situación desde entonces no ha cambiado porque yo no lo he conseguido cambiar. Que pida más minutos no significa que me los tengan que regalar, sino que me los tengo que ganar yo", dijo el propio Ibai tras el entrenamiento de ayer. El de Santutxu acumula esta temporada, entre liga y Copa, un total de 16 encuentros disputados, siete de ellos como titular. Pero, aunque el técnico rojiblanco contó con sus servicios en los últimos tres partidos, incluso saliendo de inicio en el derbi de Anoeta ante la Real Sociedad y en una posición más centrada de lo habitual ante Osasuna, el extremo está muy lejos del protagonismo que tuvo en el Alavés.

Por eso, en el pasado mercado invernal, Ibai se planteó seriamente marcharse del Athletic. El interés del Espanyol de Abelardo, técnico con quien coincidió en su exitosa etapa en Mendizorrotza, le sedujo. Y ayer lo admitió: "Tuve opciones de salir en el mercado de invierno y yo estaba dispuesto a irme. Soy sincero, a mí lo que me gusta es jugar y vi una opción buena que me atraía para tener minutos". Que el conjunto catalán estuviera en puestos de peligro y fuera un serio candidato al descenso -lo sigue siendo, ahora es colista- era un peligro que Ibai estaba dispuesto a asumir con total de jugar: "A veces hay que correr riesgos porque mi prioridad es tener minutos. Además, que un entrenador con el que has estado temporada y media te quiera en esa complicada situación para darle la vuelta es algo que te llena de ilusión y te da fuerzas". Sin embargo, Ibai, que fue el primer fichaje de la era de Aitor Elizegi -el club invirtió 3,5 millones en su regreso-, no se movió del Athletic. "Lo primero que hice fue hablar con el entrenador y con el club para ver cómo estaba mi situación y Garitano me dijo que no había opción de salir, que no iba a salir nadie más que Ganea porque todos somos jugadores importantes y cuenta con toda la plantilla", reconoció ayer Ibai. Así que el Espanyol fichó a Embarba e Ibai se quedó en Lezama: "Tengo claro que estoy aquí y quiero aportar al equipo para estar lo más arriba posible en liga y traer la Copa".

De esta forma, el domingo, el extremo se reencontrará con un estadio en el que sí que contó con minutos y se sintió importante: "Es un partido muy especial para mí porque tengo mucho cariño al Alavés, pero nunca voy a arrepentirme de estar en el Athletic porque no te puedes arrepentir de estar en el club de tu vida. Al venir sabía que podía ocurrir esto de no jugar todo lo deseado, así que ahora intento conseguir esos minutos que todos queremos".

derbi cerrado El Athletic cerrará ante el exequipo de Ibai un periplo de tres derbis consecutivos -todavía colean las derrotas ante Real Sociedad y Osasuna- y quiere hacerlo de la mejor forma posible: sumando por fin los tres puntos. El de Santutxu pide aparcar por un momento la euforia de la Copa y su semifinal ante el Granada para centrarse en una competición liguera en la que el Athletic necesita ya una victoria. Sin embargo, el extremo de Santutxu avisa del peligro que tiene el conjunto gasteiztarra en Mendizorrotza: "El Alavés es un equipo muy peligroso en casa, es un rival muy ordenado que hace mucho daño a la contra porque los delanteros que tiene tienen mucho gol".

Ibai regresa al estadio albiazul en busca de su cuarto encuentro consecutivo, con la esperanza de seguir acumulando minutos en sus piernas y con el deseo de romper la dinámica rojiblanca de nueve encuentros seguidos sin ganar. Con todo, el extremo bilbaino prevé un derbi "con muy pocas ocasiones de gol para los dos equipos". "Creo que será un partido muy cerrado donde nosotros vamos a tener un poco más el manejo del balón porque el Alavés se encuentra más cómodo jugando a la contra. Hay que tener en cuenta que en Primera es muy difícil ganar en cualquier campo, pero la del domingo es una oportunidad muy bonita que tenemos para darle la vuelta a esta racha negativa. No nos podemos permitir el lujo de estar diez partidos sin ganar", aseveró.