bilbao - Un tuit, de entre los muchos que se pierden en el universo de la conocida red social, venía a decir en la mañana de ayer algo así como que si Imanol Alguacil había visto el encuentro entre Athletic y Barcelona de la primera jornada de liga, que la Real Sociedad se vería obligado a jugar más en largo para evitar la asfixiante presión a la que, especialmente en San Mamés, somete el conjunto rojiblanco a sus rivales. No se puede dudar de que el técnico de Orio analizara con mimo y detalle el citado encuentro que dio el pistoletazo de salida a la liga, pero debió perder los apuntes del mismo. De lo contrario, no se entiende que su equipo intentara una y otra vez sacar el balón jugado desde atrás, lo que casi siempre acabó de la misma manera, en pérdida.

Excelente se mostró en labores defensivas Dani García, que pudo haber establecido una nueva marca de recuperaciones de balón en un solo encuentro. El centrocampista encontró la ayuda de Unai López en una tarea en la que Garitano, el gran triunfador de la jornada de ayer, le había pedido un plus. Un trabajo colectivo, realizado de manera coral y que tuvo en Raúl García e Iñaki Williams a los cabecillas pero en la que también se dejaron notar los dos laterales: Ander Capa y Yuri Berchiche, que fueron un martillo pilón con sus pares. Garitano le ganó en la pizarra, ese trabajo oscuro que rara vez se valora, a Alguacil, a quien no le quedó más remedio que asumir la superioridad de su rival, al que no dudó en felicitar. Este es el camino a seguir.