Marienfeld - El calor resulta agobiante a cualquier hora en Marienfeld, la pequeña localidad alemana en la que el Athletic se encuentra realizando su stage de pretemporada. La ola de calor que ha disparado los termómetros hasta casi los 40 grados no se irá hasta el sábado, aunque al menos ayer no afectó demasiado a la plantilla rojiblanca, que realizó una suave sesión de entrenamiento por la mañana y tuvo después toda la tarde libre para descansar. Algunos jugadores decidieron quedarse en el recinto hotelero mientras otros se acercaron a algún pueblo cercano.

El balón fue el protagonista ayer, en el que Garitano y el resto de su cuerpo técnico diseñaron una suave sesión que, como se ha repetido en alguna que otra ocasión en Lezama, concluyó con la disputa de un torneo de futvolley que va camino de ser tradición con el técnico de Derio. Ayer, Dani García, Raúl García y Mikel San José se proclamaron campeones del mismo. La sesión fue seguida de cerca por Goyo Arbizu y Óscar Arce, los dos miembros de la Junta Directiva que, a la espera de que hoy a la tarde-noche el presidente Aitor Elizegi llegue a tierras alemanas, se encuentran acompañando al equipo, que llegó el domingo a Marienfeld con José Ángel Iribar al frente de la expedición.

El principal objetivo del día fue soltar piernas de cara a lo que se viene hasta el domingo, cuando el stage tocará a su fin. Para hoy, como ya hicieran el lunes, tienen prevista una triple sesión que arrancará bien temprano con un ejercicio de carrera continua al que le seguirá, tras el desayuno, el trabajo físico, dejando el balón para la tarde.

El viernes, el equipo llevará a cabo las dos últimas sesiones de trabajo exigentes en el campo de entrenamiento. Serán dos nuevos entrenamientos, uno matinal y otro vespertino, como antesala de lo que se viene el fin de semana, la disputa de dos nuevos encuentros amistosos, los primeros ante equipos de la élite. El sábado, el Paderborn espera al Athletic y el domingo, antes de volar a Bilbao, el rival será el Borussia Monchengladbach.