Bilbao - La primera plantilla del Athletic ya disfruta de sus vacaciones, salvo aquellos futbolistas que están citados con las diferentes selecciones y que aún deberán esperar para desconectar. Los jugadores ya conocen que volverán al tajo el próximo 4 de julio, cuando arranca el nuevo proyecto de la mano de Gaizka Garitano, que, tal como confirmó Rafa Alkorta el pasado miércoles, contará con un grupo más reducido que el que ha gestionado este curso. Las salidas de Markel Susaeta, Mikel Rico, Ander Iturraspe y Alex Remiro aligeran el plantel a la espera de las decisiones que adopte el entrenador sobre los seis cachorros que tomarán parte en la pretemporada y los que han estado cedidos, entre ellos Mikel Vesga (Leganés) y Andoni López (Almería), con contrato en vigor y que se presentarán en Lezama con el objetivo de convencer a Garitano y quedarse en el equipo.

Vesga (Gasteiz, 8 de abril de 1993) y Andoni López (Barakaldo, 5 de abril de 1996) encarnan dos casos diferentes. El centrocampista gasteiztarra ha cumplido con el anhelo que se había marcado en el conjunto pepinero, en el que ha tenido un protagonismo importante para consumar la conquista de la permanencia en LaLiga Santander, el objetivo prioritario marcado por el club madrileño. Vesga ha contado para Mauricio Pellegrino, pero también ha tenido sus picos bajos. Su concurso se ha elevado a la comparecencia en 28 partidos oficiales, dos de ellos en la Copa, y en los que ha anotado un gol, el firmado ante el Sevilla en Butarque (1-1), para sumar un total de 2.171 minutos, una cifra notable para un futbolista que ha experimentado su segunda cesión tras la que vivió en el Sporting, también en Primera División, durante el segundo recorrido de la temporada 2016-17, aunque entonces no pudo evitar el descenso del equipo asturiano.

Su estancia en el Leganés le ha permitido curtirse en la categoría y coger un punto mayor de músculo competitivo. El hecho de compartir vestuario con compañeros de diferentes nacionalidades y perfil futbolístico le ha supuesto a Vesga, que no se ha podido enfrentar al Athletic por la denominada cláusula del miedo, adquirir nuevas vivencias, además de que la pelea por la permanencia le ha generado una exigencia que la entiende como una plusvalia de cara a su regreso en el conjunto rojiblanco, con el que ha recorrido en su etapa anterior 29 encuentros oficiales y también con un gol en su hoja de servicios, el que ejecutó frente al Sevilla en San Mamés el curso pasado.

Vesga sabe que hay vacantes en la medular con las marchas de Iturraspe y Rico, lo que le da su chance a la hora de competir con Dani García, Beñat Etxebarria y Mikel San José por un puesto. Se entiende que la dirección deportiva y el propio técnico no manejan a día de hoy una nueva cesión del gasteiztarra, que ha ganado poderío en el Leganés, un matiz que valoran Alkorta y Garitano. Su condición de zurdo y y su calidad técnica acentúan sus expectativas, pero también es consciente que debe dar un salto cualitativo respecto al jugador que ejerció la campaña pasada en el Athletic, con prestaciones muy irregulares, hasta el punto de permanecer dos meses y medio, entre marzo y mayo, en el ostracismo, sin jugar minuto alguno, después de haber gozado de la confianza de José Ángel Ziganda en el primer tramo de la temporada.

la caída de andoni El caso de Andoni López ha transcurrido por otros derroteros. El lateral izquierdo ha conocido las dos caras del fútbol en su estancia en el Almería, con el que aún les restan dos jornadas de LaLiga 1/2/3. Ha pasado de jugarlo todo en las primeras 16 jornadas a no jugar casi nada desde que recibió el alta médica de la lesión muscular que le ha lastrado. Fran Fernández, el técnico almeriense, le dio la oportunidad al canterano Martos y este ha relegado al de Bagatza al banquillo, hasta el punto de jugar solo dos partidos en la segunda vuelta liguera. El 4 de julio está citado en Lezama, aún consciente de la dificultad de hacerse un sitio en una posición propiedad de Berchiche y con Balenziaga en la recámara, aunque tiene a su favor el conocimiento sobre su persona de Garitano, con el que era un fijo en el Bilbao Athletic.