Bilbao - A base de goles, Igor Angulo (Bilbao, 1984) ha llamado la atención en el Viejo Continente desde la modesta Primera División polaca. El ídolo del Górnik Zabrze, líder de la clasificación recorridas ya dieciocho jornadas de la Lotto Ekstraklasa, suma 18 tantos en lo que va de temporada. Números de bota de oro. De hecho, supera en el ránking a estrellas como Leo Messi, Radamel Falcao o Paulo Dybala. Unos registros que no han pasado inadvertidos para los responsables de Lezama, que el pasado domingo le espiaron, conscientes de que en el mercado del Athletic no hay muchos atacantes, o por no decir casi ninguno, que pueda ser fichado. Blas Ziarreta se desplazó hasta Cracovia para ver en directo el Wisla-Górnik. El partido acabó 2-3 y Angulo dejó su sello, ya que marcó de penalti el primer gol de su equipo, con el que empezó la remontada.

Los informes sobre el extremo izquierdo que manejan en la factoría rojiblanca son buenos. También las impresiones con las que regresó de Polonia Ziarreta. Aunque todavía no hay decidido sobre su posible fichaje. Angulo, que debutó con el primer equipo del Athletic en marzo de 2003 de la mano de Jupp Heynckes directamente desde el Basconia, no cuajó como león. El de Arangoiti, entonces regateador por la banda izquierda, sumó cinco partidos como león en tres temporadas, en las que estuvo más tiempo en el Bilbao Athletic o cedido. A partir de entonces, pasó por un buen número de equipos -Cannes, Écija, Numancia, Real Unión, Enosis Paralimni (Chipre), Apollon Smyrnis (Grecia) y Platanias (Grecia)-, hasta que en el verano de 2016 recaló en su actual equipo. Ahora, una década después de desvincularse definitivamente de la disciplina bilbaina, puede que tenga un camino de vuelta muy cerca.

Angulo no tendría ningún problema de regresar a Bilbao, sino todo lo contrario. Así lo aseguró hace unas semanas en una entrevista concedida a Radio Euskadi. “El tren pasa, pero no sabes cuándo y hay que estar preparado para cogerlo en marcha. Siempre tengo el móvil conectado por si me llama el Athletic. Si me veo con opciones de ayudar es ahora, con 33 años, no antes. Estoy en mi mejor momento. No me cierro ninguna puerta. Estaría encantado de volver al Athletic”, destacó el pichichi de la liga polaca, el gran artífice de que el Górnik, equipo asentado en una localidad de tradición minera, ascendiese el pasado año a Primera División.

Como Aritz Aduriz, que en enero cumplirá 37 años y parece no tener fin, Angulo aseguró que está mejor que nunca: “Cada año me encuentro mejor. Me sorprende estar en el ránking con los mejores delanteros del mundo”. Ha madurado y ha cambiado su ubicación sobre el terreno de juego. “Queda poco del jugador que salió de Lezama. No tengo nada del jugador que desbordaba y centraba. Llevo años jugando cerca de la portería y ahí están mis números”, remarcó el de Arangoiti, un auténtico trotamundos del fútbol, que no lo ha tenido fácil para despuntar: “A mí siempre me ha ido bien en el extranjero, pero Polonia no es un país fácil para un jugador extranjero y he tenido que tirar de capacidad de adaptación. Sin esa capacidad de adaptación no es fácil, porque siempre es complicado estar lejos de los tuyos, aunque recomiendo a la gente que se arriesgue, que pruebe afuera porque es una experiencia fantástica, y si sale mal siempre puedes volver a casa”.

Cristian Ganea no convence Los responsables deportivos de Lezama también han visto a Cristian Ganea, internacional rumano criado desde pequeño en Basauri, donde jugó en el Basconia y en el Indartsu. Este lateral izquierdo de 25 años que milita en el Viitorul Constanta, donde le entrena Gica Hagi, encajaría en la filosofía del Athletic, pero los informes que manejan en el club rojiblanco, al contrario de lo que ocurre en el caso de Igor Angulo, no son satisfactorios. Parece que Ganea, que suele habitualmente la banda y goza de buen disparo, no ha convencido al Athletic. Habrá que esperar al 1 de enero, cuando se abre el mercado de invierno, para ver si hay movimientos tras dos años sin fichajes.