A pesar de los rumores que situaban a Beñat Etxebarria (Igorre, 19-02-1987) en la órbita del Athletic en el caso de que el Bayern de Munich se decidiera a abonar los 40 millones de euros que marca la cláusula de Javi Martínez, el futuro inmediato del internacional verdiblanco asoma desde ayer asociado al Wolfsburgo alemán. El traspaso, que podría cerrarse por un montante económico cercano a los 10 millones de euros tras el partido de mañana en San Mamés, en el que el Athletic recibirá a los de Pepe Mel en lo que podría suponer el último encuentro del centrocampista vizcaino como jugador del Betis, esfumaría definitivamente cualquier remota opción de que el exrojiblanco regresase a la casa de donde surgió como futbolista.
Y es que Beñat, pieza clave en el centro del campo ideado por Mel, donde ejerce como irreemplazable motor ofensivo del conjunto andaluz, fue uno de esos cachorros que cabalgaron por las praderas de Lezama desde que ingresó en la factoría rojiblanca en edad alevín. El de Igorre, aferrado al sueño de triunfar en el Athletic, pasó después por todas las categorías inferiores antes de aterrizar en el filial bilbaino, donde se fajó y maduró entre los años 2005 y 2007, llegando a disputar un total de 45 partidos y anotando dos tantos, antes de recalar a lo largo de la temporada 2006-07 en el primer equipo rojiblanco. Un salto que se vio recompensado con su debut como león en octubre de 2007 en Iruñea frente a Osasuna -el encuentro acabó 1-1 después de que el ahora valencianista Roberto Soldado igualara el tanto inicial de Igor Gabilondo-. Un envite del que el vizcaino guardaría para siempre un recuerdo especial y que a la postre supuso su único partido oficial como integrante del primer equipo.
Sin apenas minutos de los que poder disfrutar bajo las órdenes de José Manuel Esnal Mané y tras una agónica temporada en la que los rojiblancos lograron esquivar el infierno de la Segunda División en la última jornada ante el Levante, el de Igorre fue cedido en el verano de 2008 al Conquense y vendido un año después al Betis, donde durante los tres últimos años ha logrado abrazar la definitiva madurez en su juego para demostrar su indiscutible valía como mediocentro organizador.
Una continua progresión como futbolista que ha suscitado el interés del Wolfsburgo de Felix Magath, donde también milita el exatlético Diego Ribas y que parece decidido a poner toda la carne en el asador con tal de lograr alistar en sus filas al exrojiblanco, que aterrizará mañana en San Mamés con el cartel de jugador internacional a sus espaldas. Una vitola de la que siempre podrá presumir el hasta ahora diez verdiblanco, el ojito derecho de una afición que comienza a vislumbrar un futuro sin la presencia de uno de los mayores baluartes que asoman actualmente en el planeta Betis. No en vano, después de completar el pasado curso con una marca de seis goles anotados en los 35 partidos disputados en la Liga, su presencia fue solicitada por el seleccionador estatal Vicente del Bosque para preparar la reciente Eurocopa celebrada en Polonia y Ucrania.
El exrojiblanco, que acudió a la llamada de la selección estatal en calidad de novato, pero con la experiencia de haberse fogueado con la selección sub'17 en cinco encuentros, siendo incluso apartado por sus propios padres del Europeo de dicha categoría como castigo derivado de sus malas notas, tuvo la oportunidad de debutar con la absoluta el pasado 26 de mayo de 2012 en un amistoso previo a la Eurocopa frente a la selección de Serbia, donde el combinado estatal se impuso por 2-0.
El escaparate perfecto
Una vez ahí, y tras completar una notable actuación tanto en el citado envite como en un posterior encuentro amistoso ante Corea del Sur en el que tuvo la oportunidad de salir de inicio, la silueta de Beñat se acurrucó definitivamente en un perfecto escaparate. Seguido por el Athletic y por otros clubes europeos dada su meteórica progresión y su incalculable valor potencial asociado a un contrato como bético hasta 2014 a razón de una cláusula de 20 millones de euros, el Wolfsburgo alemán ha sido el más rápido y el más interesado en atar al exrojiblanco.
Así las cosas, con el Betis inmerso en pleno proceso negociador con el conjunto alemán y con el jugador a la espera de lo que dicten los acontecimientos, el de San Mamés asoma como el último escenario que a buen seguro pisará Beñat en su etapa como futbolista en la Liga. De ser así y no cerrarse incluso antes del día de mañana el fichaje que tanto anhela el Wolfsburgo, el choque que albergará mañana La Catedral -donde ya marcó Beñat la temporada pasada en el triunfo por 2-3 del Betis- serviría para despedir a un jugador criado y desarrollado en Lezama y cuyo futuro asoma por la Bundesliga. Campeonato en el que el de Igorre podría coincidir con el todavía rojiblanco Javi Martínez, cuya figura también persigue el Bayern Munich.