BILBAO. La concejala de Seguridad del Ayuntamiento de Bilbao, Amaia Arregi, ha asegurado este jueves que, pese a las protestas de algunos comerciantes, no se ha producido en los últimos tiempos un aumento significativo de robos con fuerza en comercios del Casco Viejo de la ciudad.

Arregi y el concejal bilbaíno de Desarrollo Económico, Comercio y Empleo, Xabier Otxandiano, han comparecido a petición del grupo municipal de Elkarrekin Bilbao-Podemos para explicar la situación en la que se encuentran los comercios del Casco Viejo, que se han quejado por los robos que sufren.

Según la responsable del área de Seguridad, entre enero y noviembre pasados se ha registrado en la zona siete robos más que en el mismo período del año anterior, según los datos de la Policía Municipal de Bilbao y de la Ertzaintza.

En octubre y noviembre de 2019 el número de robos con fuerza en comercios del Casco Viejo han ascendido a quince, los mismos que en dicho período de 2018.

Con estos datos, ha defendido que "no es cierto" que haya habido "una oleada" de robos en los comercios del Casco Viejo, aunque ha dicho que se está en "alerta preventiva" en este ámbito y el Ayuntamiento trabaja "mano a mano" con los comerciantes para mejorar la seguridad y la percepción de seguridad en la ciudad.

Sobre las quejas referidas a que los presuntos autores son siempre los mismos, la edil ha señalado que el sistema judicial "es tremendamente garantista" y que si se entiende que hay que cambiar las leyes "para endurecer las penas, por ejemplo, en el caso de los reincidentes, debemos impulsar medidas ante el órgano competente, en este caso el Congreso de los Diputados".

Por su parte, el concejal de Desarrollo Económico, Comercio y Empleo, Xabier Otxandiano, ha abogado por "cuidar, proteger y consumir" en el comercio del Casco Viejo, que es la zona de máxima concentración comercial de la ciudad, junto con algún espacio del Ensanche y de Indautxu, al acoger más de 600 comercios y cerca de 300 actividades hosteleras, lo que representa casi el 9 % de la actividad comercial de la ciudad.

Desde los grupos municipales en la oposición, se ha acusado al equipo de gobierno local de "autocomplacencia" en este asunto. Así lo ha hecho la concejala de Elkarrekin BIlbao-Podemos Carmen Muñoz, quien ha considerado que el pacto de seguridad, que habla de un plan específico de seguridad para el comercio "no se está cumpliendo" y ha indicado que hay "muchos robos" en el Casco Viejo y en otras zonas de la ciudad.

La concejal de EH Bildu Jone Goirizelaia ha denunciado que de los 15 robos registrados en octubre y noviembre en el Casco Viejo, 11 se han producido "en un sitio muy concreto".

Desde el PP, el concejal Carlos García ha acusado a la concejala Arregi de dar "datos parciales" al no incluir los correspondientes al mes de diciembre, cuando son los que "preocupan" por concentrarse en ese mes la mayoría de las compras de Navidad.

A su juicio, son necesarios "más medios" como cámaras que sirvan de prueba para que los delincuentes "no entren por una puerta y salgan por otra", así como "más presencia policial y más escuchar a los comerciantes", que se quejan de que "el mismo delincuente al que han denunciado" pasa luego "por delante del comercio y tienen miedo, renunciando en ocasiones a denunciar".

Por su parte, el edil Alfonso Gil, del PSE-EE, en el equipo de gobierno local junto al PNV, ha sostenido que "Bilbao es una ciudad segura" y ha defendido que la visita de cada más personas a la capital vizcaína implica "más gente en la calle" y "más contingencias", con lo que, a la vista de los datos en materia de seguridad, "algo se está haciendo bien" en el Ayuntamiento, ha concluido. EFE