BILBAO. Además, fueron localizados unos ciento treinta gramos de cogollos de la misma sustancia, dos básculas, una de ellas de pesaje industrial y otra de precisión, así como unos seis mil euros en efectivo.

La Ertzaintza ha abierto diligencias policiales en calidad de investigados por un delito de tráfico de drogas a cuatro varones de entre 34 y 51 años de edad, dos de ellos con antecedentes por hechos similares.

Este hallazgo es fruto de una investigación iniciada sobre un establecimiento dedicado a la venta de productos relacionados con la marihuana, ubicado en una zona industrial en Barakaldo.

Además de su propia actividad comercial, las indagaciones policiales levantaron las sospechas de que los responsables del local pudieran estar dedicándose también al cultivo de plantas de marihuana a gran escala. Se da la circunstancia de que los dos socios de esta empresa, ya fueron imputados en el año 2017 por un delito de tráfico de tráfico de drogas.

De esta forma, a primera hora de la mañana de ayer, se puso en marcha un operativo policial sobre este local. En torno a las ocho de la mañana, se personaron allí dos varones, tratándose de uno de los responsables del negocio y de un empleado, según reconocieron. A partir de ese momento y con su presencia, se practicó una inspección del inmueble.

Nada más entrar había un mostrador para la atención al público, varios expositores con productos relacionados con el cultivo de marihuana y una oficina. Tras unas cortinas se accedía a una zona de almacén con dos cámaras frigoríficas con semillas de la citada sustancia y un armario encastrado en la pared con espuma de poliuretano, del cual emanaba olor a marihuana.

Tal y como se pudo comprobar, uno de los paneles laterales del armario era realmente una puerta camuflada dotada con un sistema de apertura de imán, que daba acceso a una estancia superior, donde fue hallado un cultivo de marihuana, que contaba con el oportuno equipamiento técnico para el desarrollo del mismo. En total fueron decomisadas cerca de cinco mil plantas, en su mayoría de tamaño pequeño y mediano.

Además, fueron localizados en una bolsa hermética y en un frasco de cristal unos ciento treinta gramos de cogollos de marihuana.

En otros puntos, se encontraron dos básculas de pesaje, una industrial y otra de precisión, seis mil euros en efectivo y cuatro talkies, al parecer para facilitar la comunicación entre la zona de cultivo, la oficina y el propio comercio.

Ante tales circunstancias, ambos fueron imputados por un delito de tráfico de drogas.

La Ertzaintza ha abierto también diligencias a otro varón, que al parecer realizaba funciones de empleado y al segundo responsable del establecimiento.