Son irreverentes, originales y provocadores. Su actitud desafiante y su estilo directo a la hora de dirigirse a los clientes, sin filtros ni edulcorantes, les ha hecho ganarse un séquito de seguidores… pero también de ‘haters’. Entrevistamos a Miguel Pueyo, CEO de las pizzerías Isla Sicilia, la persona al frente de esta particular manera de comunicar.

Vuestra página web no deja indiferente a nadie: referencias a la policía, asuntos escandalosos, anécdotas políticamente incorrectas, incluso mención a las drogas… Pero ni una foto de pizzas ni locales…

Es que no somos gente normal y nuestra web, www.islasicilia.es, tampoco es normal. O nos amas, o nos odias. El público se ha polarizado y hemos decidido darle la razón. Tras abrir nuestro local en Bilbao (el cuarto, tras dos en Pamplona y otro en Vitoria), nos hemos dado cuenta de que en todas las ciudades nos pasa lo mismo. No tenemos clientes: tenemos fans o tenemos ‘haters’.

"No tenemos clientes: tenemos fans o tenemos ‘haters’"

¿A qué crees que se debe esa polaridad?

Nuestras pizzas son las más caras de las cuatro ciudades en las que estamos. La decoración de nuestros locales es pura provocación. Temas religiosos, sexo, arte contemporáneo... Y nuestras recetas son de todo menos tradicionales. Sabores innovadores y arriesgados de la mano de cocineros que han pasado por el Basque Culinary Center.

Hay gente a la que no le gustáis…

Nos han dicho de todo: que las pizzas son pequeñas, que son caras, que son sosas, que tienen pocos ingredientes... Nuestros cocineros hacen recetas equilibradas con los mejores ingredientes de Italia. Traemos cuatro de los cinco mejores quesos del mundo. Pero un determinado público prefiere cantidad a calidad. Y se enfadan. En Isla Sicilia no somos así y, por ello, les mandamos con cajas destempladas a que visiten la pizzería americana más cercana y les pedimos que no vuelvan más.

"Para que no disfrutes, gastes y encima me dejes una mala reseña, mejor no vengas"

Una de las prioridades de cualquier negocio a día de hoy es lograr la satisfacción del cliente y, de paso, buenas recomendaciones en Google. ¿No os importan las malas reseñas?

Las tenemos muy, muy buenas y muy malas. Pero la culpa no es del cliente ni es nuestra. Ni todos los locales son para todos los públicos ni viceversa y no nos importa decirlo. No estás en el lugar adecuado. Pero para que no disfrutes, gastes y encima me dejes una mala reseña, mejor no vengas. Para venir a nuestro local hay que tener determinados gustos gastronómicos y no tener problema en gastar en calidad.

Y, aún así, llenáis vuestros locales todos los fines de semana…

Todos. Si no reservas no tienes mesa. La realidad es que hay gente para todo y, en nuestro caso, la experiencia es tan completa que mucha gente se convierte en fan y repite constantemente. Hay gente con dinero, con cultura y con paladar que nos ha dicho que le hemos dejado sin alternativa. O nosotros o nada.

"Hay gente con dinero, con cultura y con paladar que nos ha dicho que le hemos dejado sin alternativa. O nosotros o nada"

Además de las pizzas, apostáis por una decoración de lo más provocadora, con símbolos sexuales, que ha levantado ampollas en las redes sociales.

Tenemos una decoración provocadora, no cabe duda. Nos han acusado de sexistas y pornógrafos. Pornografía son las letras de las canciones de reggaetón que escuchan ahora los críos. Por ejemplo, en Bilbao los baños están decorados con carteles de películas X de los años 70 y son de una inocencia enternecedora. En Vitoria los baños tienen cómics de estética gay con carátulas de discos de Rafaella Carrá. Cañera, pero no grotesca

¿Y por qué habéis elegido esa decoración extravagante en los baños?

Nuestros locales se inspiran en una ‘Divina comedia’ de un Dante del siglo XXI. El comedor es el Purgatorio, pero no vienes a purgar tus pecados, sino a disfrutarlos. Nuestras pizzas se llaman Lujuria, Paraíso, Envidiosa, Soberbia, Dantesca… Y nos pareció divertido que nuestros baños fueran el Infierno. 

En varias publicaciones de Instagram promocionáis vuestras noches de ‘solo para adultos’. En una de ella decíais: “L@s niñ@s molestan. Especialmente si son de otr@”. ¿Os extraña la polémica que se ha generado?

Esa es una de las polémicas que más me ha jodido porque soy padre de dos preciosos niños. En España se asocia pizzería a un local de niños, un jolgorio donde hacer cumpleaños, mucho refresco y mucha pizza de mala calidad. Pero nuestros locales son gourmet. Así que decidimos hacer, los viernes y los sábados, una experiencia ‘only adults’. Recomendado para mayores de 15 años. De los 14 turnos que tiene la semana (7 comidas y 7 cenas) solamente hay dos ‘only adults’, los otros 12 turnos puedes ir con niños. Sin embargo, hemos recibido cientos de críticas de lo que yo llamo ofendiditos, acusándonos de todo: fascistas, antiniños, racistas… 

Habéis llevado esa forma tan particular de comunicar a una newsletter que genera furor y críticas a partes iguales…

Correcto. Empecé contestando con sinceridad (y cabreo) a las reseñas en Google. La polémica se extendió a redes sociales donde recibimos muchos palos. Así que empecé a mandar una newsletter para contar a los clientes nuestra filosofía de empresa y, de repente, se hizo viral y empezó a suscribirse gente de todas partes. Como darse de alta es gratis, y de baja, también, empezaron a apuntarse cientos de personas de ciudades en las que ni siquiera tenemos abierto un local. ¡Y algunos del extranjero! 

"Empecé a mandar una newsletter para contar a los clientes nuestra filosofía de empresa y, de repente, se hizo viral y empezó a suscribirse gente de todas partes"

¿Cuál es el contenido que provoca tanta expectación?

Sobre todo anécdotas que nos han pasado en Isla Sicilia: movidas con la policía de permisos, inspecciones y controles; problemas con el personal; bromas con empleados; chascarrillos de clientes... Pero, también, opiniones personales de política, de empresa, de marketing... En realidad hablo de lo que me apetece, pero como siempre estoy de coña, la gente se lo pasa bien.

En Isla Sicilia tenéis dos cocinas separadas para poder preparar pizzas sin gluten. ¿Qué respuesta está teniendo esta apuesta? 

Los celíacos nos adoran y flipan con nosotros. Tengo un hijo celíaco y gracias a él, abrimos la línea ‘Gluten Free’. Me dijo un día que era “el celíaco más triste del mundo porque teníamos una pizzería y él no podía comer”. Así que nos propusimos hacer la mejor pizza gluten free de España y vamos camino a conseguirlo. Nos diseñó la masa Edorta Salvador, profesor de Masas y Panes de la Basque Culinary Center. En las pizzas ‘singlu’ utilizamos los mismos ingredientes, tienen el mismo tamaño y, sobre todo, el mismo precio que las con gluten. Toda la carta completa. Como padre de celíaco, estoy harto de que los productos singlu sean de peor calidad, más pequeños y más caros. Por este motivo, en nuestros locales de Isla Sicilia, tenemos dos cocinas separadas, porque llevo años conviviendo en casa con la contaminación cruzada.

Más info: www.islasicilia.es


PAMPLONA:

C/Pío XII, 39

C/Julián Gayarre, 34


VITORIA-GASTEIZ:

Avenida Reina Sofía, 96


BILBAO

Sabino AranaEtorbidea, 32