El que fuera Ararteko entre 1995 y 2000, Xabier Markiegi, falleció en la noche del domingo a los 82 años. La propia oficina del defensor del pueblo vasco ha hecho pública la noticia a través de una nota en la que destaca que el mandato de este exparlamentario y antiguo dirigente de Euskadiko Ezkerra se caracterizó por ser el de la "consolidación de esta institución" y su "apertura a la sociedad".
Ello se visualizó, añade, en "un aumento cuantitativo y cualitativo de las distintas actividades realizadas por esta oficina" y con la puesta en marcha de dos nuevas sedes en Bilbao y Donostia. La institución que actualmente lidera Manu Lezertua informa de que Martiegi falleció en su domicilio de Aguadulce (Almería), donde residía con su mujer, Begoña. Según ha informado El País, se recuperaba de una pequeña intervención tras haber sufrido una caída.
Nacido en 1938 en Bilbao, y de familia jeltzale y religiosa, se licenció en Filosofía y Letras, Psicología y Teología, y cursó estudios de ingeniería. Era profesor con plaza en Gallarta, y durante los cinco años que permaneció al frente del Ararteko, esta institución "presentó diferentes informes extraordinarios ante el Parlamento Vasco sobre los problemas de la infancia, adolescencia y tercera edad, los enfermos mentales, etc., cuestiones todas de hondo calado social", ha señalado la oficina.
Entre ellos destaca "el informe sobre La situación de las cárceles en el País Vasco o el informe sobre los presuntos malos tratos que sufren los inmigrantes por parte de los cuerpos policiales, conocido coloquialmente como Informe de San Francisco". Ha concluido que "siempre le recordaremos y mandamos un fuerte abrazo a su familia".UN ARARTEKO DE CONSENSO
En declaraciones al periódico Bilbao cuando estaba cerca de concluir su mandato, Markiegi resaltó sobre su cargo que "la gran fuerza de esta institución es que no es ejecutiva ni coercitiva". "Es muy gratificante el conseguir que se restituyan los derechos fundamentales del ciudadano que han sido conculcados sin necesidad de que intervenga un juez. A nosotros se nos exige un mayor poder de persuasión", apostilló en la misma entrevista.
Markiegi tomó posesión como Ararteko el 3 de marzo de 1995 con los apoyos del PNV, PSE, IU y Unidad Alavesa. Durante su mandato, hasta el 11 de septiembre de 2000, le acompañó como adjunta la abogada Mercedes Agúndez Basterra, que le sustituyó como Ararteko en funciones hasta el 25 de junio de 2004. Markiegi se puso a disposición del Parlamento Vasco para repetir en el cargo, y su reelección llegó a ser propuesta con el apoyo del PNV, pero discrepancias sobre el nombramiento de su equipo hicieron que no se llegara a un acuerdo.
Sobre su carrera política, fue vicesecretario general de Euskadiko Ezkerra (EE) antes de la fusión con el PSE y parlamentario durante 14 años. Entró en la Cámara vasca en 1981 en sustitución de Mario Onaindia. En marzo de 1993 se celebró el VI Congreso de EE, donde se decidió la fusión con el PSE que dio lugar al PSE-EE, pero no se subió a ese barco y pasó a engrosar el Grupo Mixto. Tras dejar de ser Ararteko, trabajó para la Fundación Víctimas del Terrorismo y dirigió el Instituto Cervantes de Rabat (2002-2007). También el primer vicepresidente de la Fundación Fernando Buesa.
En el apartado de reacciones a su fallecimiento, la secretaria general del PSE Idoia Mendia, ha dicho que "su compromiso con los derechos humanos, con su país y con sus ideas representan un ejemplo a seguir". La Fundación Fernando Buesa le ha calificado de "hombre honesto y comprometido con los valores democráticos", y el Instituto Cervantes de Rabat recibió la noticia "con gran pesar" y escribió: "Que descanse en paz".
