Se han cumplido tres semanas desde que el Tribunal Superior de Justicia del País Vasco (TSJPV) anulara de forma cautelar el cierre de bares y restaurantes en los municipios en zona roja. Pasado este tiempo, en Onda Vasca-Grupo Noticias, el gerente de la Asociación de Hostelería de Bizkaia, Héctor Sánchez, ha asegurado que el tiempo les ha dado la razón, y que se ha demostrado que sus alegaciones, que desvinculaban el aumento de contagios con la actividad hostelera, eran acertadas.

"No hay vencedores ni vencidos. No se trata de una revancha. En su momento mucha gente criticó el auto por contraproducente, pero han pasado tres semanas y mientras entonces estábamos en una incidencia de casi 600, ahora estamos en 250. Menos de la mitad, y a pesar de que los bares están abiertos", destaca Sánchez.

El responsable de los hosteleros de Bizkaia destaca la necesidad de equilibrar los intereses sanitarios y económicos. Además, reconoce que los clientes están más concienciados con el cumplimiento de las normas en los locales hosteleros. "Nada tiene que ver lo que veíamos en una terraza durante el verano, y lo que vemos ahora. La gente utiliza la mascarilla con más cuidado".

Además, Sánchez ha negado que la relación del sector con el Gobierno vasco se haya visto dañada por el recurso presentado ante el TSJPV. "Estamos hablando con el ejecutivo para articular nuevas ayudas al sector. Empezamos ya a hablar de importes, pero se negocie lo que se negocie nunca será suficiente para compensar los cierres".

Por otro lado, el gerente de la Asociación de Hostelería de Bizkaia, aunque lo ve poco probable, espera que el LABI decida el viernes levantar algunas restricciones que afectan a la hostelería.

SALONES DE JUEGO

El presidente de la Asociación de Salones de Juego de Euskadi, José Félix Sanz, en Onda Vasca-Grupo Noticias, ha dicho que su sector se siente discriminado "por tener que regirse todavía por el semáforo de colores". Cree que han sido injustamente tratado porque al tener un aforo mucho más reducido que cualquier otro local de hostelería, tienen más medios a la hora de hacer cumplir las medidas covid.

Sanz también ha lamentado que a pesar de haber estado cerrados la mayor parte del último año, no hayan recibido ninguna bonificación y hayan tenido que abonar en su totalidad un impuesto directo como es la tasa al juego.