BILBAO.La marcha se ha iniciado a las siete y media de la tarde, media hora después de lo previsto, debido a la avalancha de gente que ha secundado la convocatoria. A esa hora, los manifestantes, todavía parados, llegaban desde la Plaza del Sagrado Corazón hasta la Plaza Moyúa.

El metro, que ha transportado cientos de pasajeros que se dirigían a la marcha, se ha visto obligado a abrir las canceladoras para permitir la rápida salida de la gente.

Las manifestantes han recorrido la ciudad, por la Gran Vía, tras una pancarta en la que podía leerse "Las vidas en el centro" y coreando consignas como "Abajo el patriarcado, que va a caer" o "Arriba el feminismo, que va a vencer", y otras como "Aquí estamos, nosotras no violamos".

GASTEIZ

En Gasteiz y Donostia , también por la tarde, se han manifestado miles de personas por la igualdad de oportunidades para las mujeres.

En Donostia, los manifestantes han partido del Antiguo y han llegado hasta el Boulevard y ha reclamado otra sociedad alternativa al "heteropatriarcado capitalista". En la lectura del comunicado, han incidido en la lucha contra el machismo.

En la capital alavesa se ha vivido otra manifestación multitudinaria, encabezada por tres tractores, simbolizando la participación de la mujer en el mundo rural, que ha partido desde el Centro Cívico Iparralde hasta llegar a la plaza de la Virgen Blanca.

MANIFIESTO

La marcha de Bilbao ha concluido en el Ayuntamiento, donde distintas portavoces del movimiento feminista han leído un comunicado en el que han afirmado que este año han querido priorizar una forma de organización que responda a la realidad concreta de cada barrio, "pueblo o grupo, ya que ésa es la base para construir un pueblo desde el feminismo". "Aunando fuerzas, creando alianzas y profundizando en ellas. Nos hemos unido en la lucha sujetos diversos de transformación y hemos politizado la exclusión. Juntas nos hemos empoderado y ese es nuestro gran éxito", han indicado.

Dicho esto, han lamentado que "faltan muchas mujeres en la huelga: las asesinadas, las encarceladas, las que están presas en los CIES, las mujeres que por están en situación de explotación hoy no pueden dejar sus empleos y trabajos". "`Por todas vosotras estamos hoy aquí! No nos limitamos a negar el sistema. `Nosotras soñamos y proponemos una sociedad que ponga en el centro las vidas!", han exclamado.

Asimismo, han exigido responsabilidades colectivas para la sostenibilidad de la vida, porque, según han aseverado, "hay vidas en esta sociedad que tienen más valor que otras".

Tras pedir un renovado pacto social, han afirmado que están en huelga para superar la "explotación laboral, el racismo y la división por sexo-género, para ser soberanas de nuestras tierras y nuestros cuerpos, para redistribuir el trabajo y la riqueza de un modo justo".

Por último, han señalado que durante los últimos días han oído muchos discursos "políticamente correctos, pero pocos o ninguno son los pasos que se han dado para repartir los trabajos que realizamos gratuitamente".

"¿Dónde está la responsabilidad de los hombres y las instituciones públicas? ¿Qué medidas concretas se tomarán en los próximos años? Los trabajos de cuidado siguen realizándose en sectores feminizados y privatizados, muchos a cargo de la explotación mujeres migrantes", han concluido.