BRUSELAS. “Permanecer unida y coordinar la respuesta con Francia”, este será el camino a seguir para Bruselas ante la decisión de Estados Unidos de gravar con un 100% los productos galos por valor de 2.400 millones de dólares. La Comisión Europea iniciará “discusiones inmediatas” para prevenir una disputa ante la OMC. Washington reaccionaba así a la llamada “tasa de servicios digitales” francesa, que preveía impuestos contra las tecnológicas Apple, Amazon, Facebook y Google.
El conflicto sobre aranceles que arrastran las dos potencias transatlánticas, Estados Unidos y la Unión Europea continúa. Este martes, la Administración Trump anunciaba que impondrá aranceles a los productos franceses en respuesta a la Tasa Google promovida por París. Los afectados son las grandes empresas tecnológicas norteamericanas, Facebook, Google, Apple y Amazon; mientras que por la parte francesa lo son productos como el vino, el champagne y el queso, que afrontan unos aranceles del 100% por valor de 2.400 millones de dólares. Ante la decisión estadounidense, Daniel Rosario, portavoz de comercio de la Comisión Europea, aseguró que Bruselas “iniciará una discusión inmediata con EE.UU.” para así “prevenir que se alce una disputa a la Organización Mundial del Comercio (OMC)”. Aun así avisa de que la situación deja “varios caminos abiertos, incluida una disputa” y confirmó que para la Comisión Europea, la OMC sigue siendo en lugar en el que “encontrar una solución”. El objetivo del Ejecutivo comunitario es encontrar una “solución global a largo término” y que incluya también el conflicto abierto sobre los aranceles por el caso Airbus. Además, recordó que la Unión Europea actuará como una sola voz. El lunes la oficina de Comercio de Estados Unidos precipitó el caso al considerar que los impuestos de Francia discriminaban las cuatro compañías norteamericanas. El país galo, deseoso de rascar parte de los beneficios que las tecnológicas obtienen en su territorio, impuso el pasado agosto la llamada tasa de servicios digitales.
Respuesta firme y coordinada
En declaraciones al medio francés Radio Classique, Bruno Le Maire, ministro de Economía francés, aseguró que “el proyecto, que podría aplicarse de aquí a 30 días, de nuevas sanciones contra Francia es inaceptable”. El ministro se mostró sorprendido ante la reacción de la potencia norteamericana y defendió que “no es el comportamiento que esperan de Estados Unidos frente a uno de sus principales aliados, Francia, y de manera general, Europa”. El Elíseo pide una respuesta firme y coordinada desde la UE después de la falta de consenso en las capitales europeas impidiese aplicar la Tasa Google a nivel comunitario. A pesar de la reacción del gobierno francés, hace tiempo que las relaciones comerciales entre las dos potencias están lejos de ser idílicas. La batalla por los aranceles en el caso de las subvenciones ilegales a la compañía aeronáutica Airbus, que grava con un 25% de impuestos productos como el aceite de oliva, el whiskey o el vino, ha puesto en la cuerda floja a los agricultores europeos.
Además, el conflicto está lejos de resolverse de forma diplomática, a pesar de los deseos de la Comisión Europea. Se espera que continúe con el futuro fallo de la OMC en el caso paralelo por las ayudas a la compañía estadounidense Boeing. Un conflicto que se recrudece poco tiempo antes de que la OMC quede prácticamente sin poder ante el bloqueo que está imponiendo EE.UU. a la renovación de sus órganos.
