Bruselas - Las últimas manifestaciones en Francia contra las reformas económicas del presidente Emmanuel Macron han tenido el número de participantes más bajo desde el comienzo de las protestas. El gobierno calcula que en la última de las concentraciones acudieron 10.000 personas, muy por debajo de las 300.000 que asistieron a la primera. Al mismo tiempo, el índice de popularidad del presidente francés sube hasta un 33%, casi el doble de lo que obtenía en noviembre cuando comenzó el movimiento: un 18%. ¿Qué ha sido de los chalecos amarillos? Seis meses después de que comenzara el movimiento en diversos puntos del país, cada vez son menos los participantes en estas manifestaciones contra las reformas económicas de Macron. De poner de rodillas al Elíseo a desaparecer de las noticias.

Según el Ministerio del Interior, en la vigésimo novena concentración se reunieron 1.500 manifestantes en París, y otros 10.000 en el resto del país. Cifras que contrastan con los 300.000 que se calculaban en sus comienzos en noviembre de 2018. Ya dos fines de semana antes se produjeron bajas: 15.000 personas según datos de Interior y 41.000 contados por los organizadores. En París se calculaban 1.600.

Uno de los manifestantes, que lleva formando parte de las protestas desde noviembre, confesaba a France 24 que probablemente se produzca una “pausa” en verano, aunque volverán en septiembre. Pero no todos son tan optimistas. Otros piensan que esta situación es difícil que remonte y culpan directamente al gobierno.

Estas protestas comenzaron en noviembre en varias ciudades de Francia contra el aumento de los impuestos sobre el combustible que el gobierno de Emmanuel Macron pretendía imponer. Las oleadas de gente en la calle tuvieron respuesta y el presidente optó por dar marcha atrás y cambiar las condiciones. - Aquí Europa