Bilbao - “Yo tenía un tinglado montado en casa y lo intuía: esto tiene que gustar a la gente”. Alberto Atela ha trabajado en España, Austria, Escocia y Alemania. Es un hombre formado en Administración y Gestión de Empresas que se ha dejado llevar por cuatro de sus pasiones -la Fórmula Uno, la tecnología, el videojuego y el 3D...- para invertirlas en el diseño de Fórmula Rácing, un negocio que reproduce las sensaciones de conducir un Fórmula Uno. Los boxes del negocio están ubicados en el número 9 de Pozas pero, cruzado el umbral, uno puede sumergirse en cualquier circuito sobre la faz de la tierra.
Esta aventura puede bautizarse con el nombre de...
-Centro de simulacro de conducción de monoplazas, algo que, sin ser un Fórmula Uno, es su equivalente.
No son coches de paseo, deduzco...
-Andar con un coche, conducirlo, no es divertido. Lo divertido es correr sin límites, llevarlo hasta donde uno pueda.
¡Cuidado, que se estampa!
-Es una de las ventajas de este sistema: uno puede correr al límite, algo que no puedes hacer en un circuito de Fórmula Uno. Ni siquiera en uno de karting. Y puedes entrar en circuitos que tampoco podrías pisar fuera de este mundo virtual en 3D. Tampoco te afecta la climatología ni te haces daño en los accidentes. Todo son ventajas
Asegura que se reproducen las sensaciones de un Fórmula Uno. Pero no uno cualquiera puede conducir un coche así...
-No es tan difícil llevar un Fórmula Uno como dicen. Es más, nosotros tenemos ayudas electrónicas. Con ellas, hasta un niño de ocho años puede conducir.
¡Es un gran videojuego!
-¿Perdón?
Digo que es un videojuego muy completo...
-No es un videojuego. Nadie de quienes han conducido lo siente así. Es más, hacen mejores tiempos los pilotos de karting que los reyes de la Play.
¿Qué le dijeron en su entorno cuando se lanzó por estas apuesta?
-Es curioso. Al principio, que no lo hiciera, que me estrellaba. Cuando ven que vas a intentarlo por encima de todo, tratan de decirte cómo. Y cuando tienes éxito, te recuerdan que ellos siempre te apoyaron.
¿Qué le han transmitido los primeros pilotos?
-Es algo curioso: te estrechan la mano y te abrazan, agradeciéndote que puedan haber sentido algo así. En verdad es una experiencia más que un juego. Una forma de ocupar media hora de ocio en la ciudad de una manera trepidante.
Supongo que habrá gente diestra que de inmediato se haga con los mandos...
-No tiene fin. La Fórmula Uno y el golf son dos deportes que, contra lo que pudiera pensarse, se parecen: no existe la vuelta perfecta como no existe el golpe perfecto. Uno siempre puede mejorar.
¿Cómo, en una máquina como la suya?
-En cada decisión que uno toma en la siguiente curva, en la improvisación... En fin, como todo en la vida, en cada paso que das.
creador de fórmula rácing