ISITAR lugares históricos y parajes naturales, a la vez que fomentar hábitos de vida saludables es el objetivo de Arratia Herrik Herri, un sendero que discurre por los municipios de la comarca vizcaina de Arratia y que impulsa la Mancomunidad. Este viernes proponemos en estas páginas un paseo entre Igorre, Bedia y Lemoa, con paradas en caseríos, ermitas, iglesias y las famosas estelas funerarias de Elorriaga.

Andar mejora la tensión arterial, fortalece la musculatura y nos ayuda a controlar el sobrepeso. Y lo ideal es practicar esta actividad física con regularidad, al menos cuatro o cinco veces por semana. Esa es la propuesta de la Mancomunidad de Arratia, que nos propone recorrer sus localidades, pueblo a pueblo, a través de senderos. Aquí le tomamos la palabra y nos centramos en el trayecto que une Igorre y Lemoa, con visita incluida a la cercana Bedia.

El sendero partiría del polígono industrial de Igorre cruzando Zubiko Zubia, su puente medieval, que antiguamente unía la zona con Gasteiz. Allí sorprenden al caminante los barrios de Urkizu y Garakoi, y se adentra el paseante en Lemoa por Errekalde y Larrabeti, donde otro puente, el de este último barrio, también llama la atención. Además, debe visitarse un conjunto de estelas funerarias en la necrópolis de Elorriaga, que datan de la época romana.

La ruta seguirá adelante en dirección a Bedia cruzando el puente peatonal de madera de Lemoa, para continuar por la margen izquierda del río Arratia.

Será cerca del apeadero de Bedia cuando se gire hacia la derecha para volver a cruzar el río y llegar a la plaza del pueblo, donde se puede admirar la iglesia de San Juan Bautista, construida hacia el año 1745. Cuenta con tres altares y una nave con varias bóvedas.

de turismo

Quienes deseen ir más allá del mero recorrido por el sendero entre estas localidades, que puede consultarse en la página web de la Mancomunidad a través de enlaces y un tríptico con puntos de interés, consejos y un sencillo mapa del itinerario, pueden animarse a visitar otros escenarios que nos propone la comarca.

En el caso de Igorre, ubicado entre los parques naturales de Urkiola y Gorbeia, se pueden conocer los montes Mandola y Aramotz, y la iglesia parroquial de Santa María, cuyo interior incluye varios retablos. También destacan sus numerosas ermitas, entre las que destaca la medieval de San Cristóbal de Elgezua, de planta rectangular.

Y Bedia se enorgullece de la ermita de San Lorenzo, la escultura Elejalde, el palacio Bidekolea y los numerosos baserris, molinos y casas palacio que convierten la localidad en un lugar acogedor que ha mantenido la tradición del ambiente rural vasco.