Bilbao - Un año más, y ya van 16 temporadas, el Parque de la Naturaleza de Navarra ha abierto sus puertas a los miles de visitantes vascos que cada año eligen este enclave para disfrutar de sus vacaciones. Sendaviva es probablemente el lugar que más turistas recibe al año provenientes de todo el Estado y por tanto, responsable directo del crecimiento del sector en Navarra. que sin duda destaca por tener un perfil muy familiar.

¿Cómo valora el peso de Sendaviva en el desarrollo turístico de la comunidad foral?

-Cuando se creó el parque, en 2003, la zona de referencia turística era el norte de Navarra, donde estaban ubicados la mayoría de los agroturismos. Ahora mismo esta tendencia ha cambiado totalmente, existiendo más agroturismos en la Ribera, un cambio en el que ha tenido mucho que ver Sendaviva.

El agroturismo rural es el sello de identidad de Navarra. Por lo que comenta, el parque ha influido en su crecimiento.

-La comunidad foral lleva apoyándose desde hace mucho tiempo en el modelo de turismo rural. El parque ha contribuido a su desarrollo pero también es verdad que la capacidad de alojamiento del parque es cada vez más variada con hoteles, campings y por supuesto, casas de agroturismo, lo que posibilita que Sendaviva tenga más posibilidades de crecer a nivel de visitantes de fuera de la comunidad.

¿Qué ofrece actualmente Sendaviva?

-La oferta de Sendaviva es difícil de explicar ya que somos una mezcla entre parque de atracciones, zoológico y parque de espectáculos.

En la vertiente animal, es todo un referente. ¿A qué cree que se debe?

-Nuestro objetivo es mostrar a los animales de una forma amable y para ello optamos por el régimen de semilibertad. Además, intentamos educar y concienciar respeto hacia el medio ambiente.

¿El resto de atractivos?

-Sin duda buscamos el ocio de los visitantes de una manera diferente al resto de parques. Las actividades están dirigidas a todos los públicos, desde los más pequeños hasta los mayores ofreciéndoles todo tipo de atracciones, tirolinas, caída libre, sillas voladoras... y todo eso lo tenemos en un paraje incomparable como es el Parque Natural de las Bardenas, un escenario paisajístico desértico espectacular y brutal.

El parque está abierto una temporada más.

-Sí, lo abrimos antes de Semana Santa pero las condiciones climatológicas nos obligan a cerrarlo a partir del mes de noviembre. Ahora mismo es la época perfecta para visitarlo.

¿Con qué novedades se van a encontrar los visitantes esta temporada?

-El espectáculo de las aves rapaces es el que más novedades introduce esta temporada al contar con la presencia de nuevas aves. Una de ellas es el águila de Wahlberg, que se convierte así en el único ejemplar que vuela en una exhibición en toda Europa. El águila de Wahlberg es natural de África, y habita en el sureste del desierto del Sáhara. El espectáculo introduce también un cuarto buitre leonado, de nombre Lumbier y con una historia muy bonita.

¿Y cuál es esa historia?

-Este buitre leonado llegó al parque siendo un pollo en plumón tras haberse caído desde su nido en la Foz de Lumbier. Después de un año de cuidados y atenciones, Lumbier vuelve a volar.

Pero no solo las novedades llegan de nuevas atracciones o espectáculos, también introduce cambios en la gestión del parque.

-Así es. Sí uno de nuestros objetivos es educar y concienciar a los pequeños en cuestiones medioambientales y de respeto a la naturaleza, la primera de las medidas que hemos adoptado es la de dar ejemplo. Para ello hemos retirado en toda la instalaciones el plástico, aproximadamente 540 kilogramos de productos de plástico de la restauración del parque, más de 170.000 unidades, sustituyéndolos por productos compostables.

Hemos procedido también a la instalación de un parque solar que permite el autoconsumo energético y damos la opción a los visitantes de conocer en tiempo real la producción energética de varios de los paneles. En el apartado de restauración se ha optado por adoptar hábitos de consumo responsables sumándonos al movimiento Too Good To Go para alcanzar la cifra de desperdicio Cero. Bajo este reto hemos puesto en funcionamiento una app que permite a los visitantes disfrutar de la comida de calidad del parque vendiendo el excedente, en lugar de tirarlo a la basura. Bajo esta política, ofrecemos al visitante llevarse al final del día la comida que ha sobrado por un precio muy económico y con una calidad excelente. Otra de las acciones en la misma línea es la promoción de los productos Kilómetro Cero, ofrecer el mejor producto apoyándonos en el producto local.

¿Es verdad que los vascos son los visitantes que más atraídos se sienten por Sendaviva?

-Sin duda alguna. Ahora mismo el público predominante en el parque es mayoritariamente vasco. Estamos hablando de cerca del 40% de los visitantes. Con unos índices de satisfacción altísimos. Y no hay que olvidar que tenemos que vivir de las personas que repiten la visita. Por ese motivo nuestra preocupación es que salgan satisfechos y para ello tomamos todas las medidas necesarias para que no haya saturación de público ni grandes colas en las atracciones.

El propio parque cuenta con una agencia de viajes que promociona todos los servicios al cliente.

-De esta forma ofrecemos todas las facilidades al visitante. Desde la propia web del parque el cliente puede contratar todo el paquete del viaje; las entradas, el alojamiento, las comidas, las actividades exteriores que quiere realizar...

De cara a este verano, ¿hay alguna campaña de promoción?

-Nuestro objetivo es que quienes estén interesados en venir a Sendaviva no tengan que realizar grandes desembolsos económicos. Y lo estamos consiguiendo. En estos momentos por 48 euros es posible alojarse en uno de los hoteles de la zona y disfrutar de todo el parque.

¿Y cómo lo consiguen?

-Marcamos unos precios estables a lo largo del año para alojarse cerca del parque, de tal forma que evitamos que haya grandes diferencias según la temporada.

¿Cuál es el tiempo efectivo de visita al parque?

-Tenemos estimado que se necesitan más de 14 horas para poder montarse en todas las atracciones y disfrutar de los espectáculos y actividades. Recomendamos la estancia en el parque de un fin de semana como mínimo. Ten en cuenta que estamos hablando de un parque de unas dimensiones muy grandes, de más de 120 hectáreas. Pero además del parque, Navarra tiene muchos lugares para ver, el Valle de Irati, Tudela, Estella...