Los años dorados de Marbella, aquellos en los que la ciudad malagueña era el epicentro de la jet set en España y que atraía a famosos y burgueses de medio mundo, ya quedan lejos. La época de las fiestas elitistas y de los invitados con pedigrí ya pasó y este jueves ha muerto una de las que fue sus grandes protagonistas: Olivia Valère.

La empresaria francesa ha fallecido en su casa de París a causa de un cáncer de estómago que le fue diagnosticado hace un año y que no ha podido superar. Debido al empeoramiento de las últimas semanas, Valère, de 75 años, consciente del desenlace que se avecinaba, decidió pasar sus últimos días en su domicilio francés y rodeada de su familia, aunque será enterrada en Marbella debido debido a su expreso deseo.

De hecho ha pasado los 40 años finales de su vida en la ciudad andaluza, pese a que también vivía épocas en París, Nueva York y Punta del Este (Uruguay). Valère llegó a Marbella en 1983 para celebrar el cumpleaños de una amiga y el cambio del frío y la nieve de París al sol y el cielo azul de la Costa de Sol le hicieron fijar allí su residencia.

Sólo un año después, en 1984, abrió su primera discoteca en Puerto Banús, que le llevó a ser muy popular y a codearse en ella con personalidades del nivel de Sean Connery, Shirley Bassey, Alfonso de Hohenlohe o Jaime de Mora. Los años 80 y los 90, de la mano de Jesús Gil como alcalde, le resultaron muy propicios y, aunque después la ciudad perdió brillo, Valère inauguró en el año 2000 su segunda discoteca, a la que puso su nombre, que sigue siendo una referencia de la noche marbellí y al frente de la cual están sus hijos.

En los últimos años se la ha podido ver en programas de televisión como ¡Mira quién salta!, Mujeres ricas o ¡Mira quién salta!Mujeres ricasVen a cenar conmigo