Según varios estudios que hemos analizado, un alto porcentaje no eran informáticos de vocación sino que se apuntaron al carro de la tecnología por esa facilidad de poder llevar dinero a casa. Muchos de ellos en la actualidad se encuentran aburridos y descontentos con las tareas que realizan y hay un gran número que ha abandonado la programación para dedicarse a trabajos que no tienen nada que ver. Es verdad que una gran parte por su experiencia han pasado a puestos de dirección y forman equipos de alto rendimiento y son muy valorados en sus compañías.

El problema está surgiendo últimamente cuando ese grupo que se encuentra alrededor de los 50 años está viendo peligrar sus puestos de trabajo por culpa de la falta de proyectos debido a la pandemia. En los estudios que hemos analizado vemos cómo los informáticos de vocación optan por dos vías. Por un lado formarse de nuevo, especialmente en 4 áreas: la robótica, la Inteligencia Artificial, Big Data y BlockChain. Estas áreas sí tienen una alta demanda de profesionales y existen muchos cursos de pago y gratuitos que permiten ese reciclaje cuando eres un verdadero amante de la tecnología. La segunda vía es la del autoempleo o la del emprendimiento. No es fácil trabajar de forma autónoma y constituir o crear una nueva empresa no es un camino sencillo, ya que las trabas burocráticas, fiscales y de desarrollo son muy grandes. La opción de emprender, digan lo que digan, no es para todo el mundo. Crear una empresa en el registro es sencillo pero sacarla adelante, dar con la idea adecuada y, sobre todo, lograr formar un equipo que esté ilusionado requiere tiempo y dinero. Hay ayudas y centros que te pueden apoyar en los inicios, no estoy tratando de desanimar a nadie, pero si crees que puedes salir adelante de esta forma o quieres saber si eres capaz, trata de terminar un plan de negocio, es un buen ejercicio.

Pero hay una generación que está teniendo muchos problemas en la actualidad para encontrar empleo. Son los informáticos no vocacionales, que al encontrarse sin trabajo han optado por pivotar y probar en otro mundo que no sea el de la tecnología. El mayor problema es la edad y es que las empresas no colocan trabajadores de más de 50 años sin ni siquiera seguir leyendo el currículum y pensar en la experiencia de todas estas personas. La mayoría ha optado por el emprendimiento en áreas en las que no son expertos, pero en las que tienen ilusión.

Mas de 15.000 autónomos nuevos en el año 2020 en esta franja de edad se han lanzado a la aventura de emprender ante la imposibilidad de encontrar trabajo de otra forma. Aquí sí son capaces de demostrar que la edad y la experiencia son dos de las mejores armas con las que cuentan. No entiendo a las empresas que están renunciando a contratar personas de esta edad porque si analizamos los casos de éxito que han tenido estos autónomos, nos encontramos con una gran sorpresa, y además negocios que han sido capaces de arrancar en plena pandemia. Si te encuentras en esta situación, mi consejo es empezar por la formación antes del emprendimiento. Internet está repleto de ideas y de formas de aprender.

@juandelaherran