nueva york - La plataforma Starz ha vuelto a apostar este año por la serie Vida con una segunda temporada en la que sigue dejando al desnudo la realidad de los latinos en EE.UU., con especial protagonismo para el tabú de la homosexualidad y la creciente gentrificación de las grandes ciudades.

El show, que se presentó ayer en el Festival de Cine de Tribeca en Nueva York, se sitúa a años luz del estereotipo del inmigrante latino en territorio estadounidense y presenta un ambiente en el que prima la lucha a favor de la diversidad sexual y en contra de las injusticias sociales. “Para empezar, en EE.UU. no hay muchas películas latinas, pero tampoco hay mucha televisión latina, y normalmente lo que vemos son estereotipos de criminales, sirvientas o ese tipo de cosas”, declaró a Efe Tanya Saracho, creadora de la serie que podrá verse a partir del 23 de mayo. Vida es la primera en utilizar la cuestión de la gentrificación y la homosexualidad como eje central de la trama. “Yo me identifico como queer y también muchos de mis actores, guionistas, editoras. Eso quiere decir que es el mundo en el que vivimos y es importante que se represente”, subrayó la mexicana afincada en EE.UU.

Vida, que se desarrolla en la zona Este de Los Ángeles, comenzó en la primera temporada con los problemas de dos hermanas que vuelven al hogar de su madre por su fallecimiento para enfrentarse a una peculiar situación: la supuesta compañera de piso de su progenitora en realidad era su esposa. Así, con la revelación de una homosexualidad oculta durante décadas, arrancó el primer episodio, para pasar a incluir escenas sexuales extremadamente realistas y explícitas entre distintos tipos de parejas que en raras ocasiones se han retratado en la pequeña pantalla. Según las protagonistas, Melissa Barrera y Mishel Prada, Vida es una serie que trata sobre latinos, hecha por latinos para la comunidad latina, “contando historias que nunca antes se han contado”. Entre ellas, el fenómeno de la gentrificación, en el que comunidades humildes de las grandes ciudades son expulsadas gradualmente de determinados barrios por grandes compañías o personas con mayor poder adquisitivo al revalorizarse el terreno sobre el que viven.

gentrificación Este es sólo uno de los problemas a los que se enfrentan Lyn (Melissa Barrera) y Emma (Mishel Prada), que intentan impedir que una gran corporación se apropie del bar de su madre. “Es importante porque hay que crear consciencia de la realidad de las cosas, cómo ciertas comunidades en EE.UU. están siendo afectadas. Esta sucediendo en todo el mundo”, dijo la mexicana Barrera, conocida por las telenovelas Siempre tuya Acapulco y Tanto amor. “Tanya Saracho quería hacer un show centrado en el Este de Los Ángeles con personajes que hayan crecido ahí, así que era inevitable hablar de eso”, opinó. Pero Vida aborda otras cuestiones que la gran mayoría de los latinos ya nacidos en EE.UU. pueden entender, como la dificultad de encontrar una identidad por no sentirse totalmente estadounidense, pero tampoco del país de origen de sus progenitores. “Cuando creces aquí vas a la ciudad de tus padres y no es familiar. Lo conoces, pero no es tuyo, no es tu hogar, y cuando estás aquí te están diciendo que no puedes estar aquí”, explicó Prada. “No eres lo suficientemente americano”, remató Barrera.