bilbao - Abre el telón con Esperanza Aguirre como invitada, dice que la presidenta de los populares madrileños sigue reivindicándose como el verso suelto del PP, no pone la mano en el fuego por Rajoy y sin ninguna pregunta sobre el grupo que lidera Pablo Iglesias, se arrancó ella sola a hablar de Podemos. Cambiando a un tercio más lúdico y pasional, confiesa que es muy del Barça, que mañana juega en San Mamés. Políticamente correcto, él dice que es muy sincero, manifiesta mucho cariño por el Athletic, aunque augura como resultado un 0-1 y los tres puntos para su equipo.
Se ha convertido usted en uno de los hombres de moda en televisión.
-¿Sí? No tengo conciencia de que eso haya ocurrido.
Veo que va de modesto, ¿no?
-Creo que estas cosas hay que relativizarlas, no es para tanto. Ni cuando te dicen que lo haces tan bien lo estás haciendo así de bien, y lo mismo digo para cuando te dicen que lo haces muy mal. Sobre todo, hay que buscar lo del término medio y no fliparse demasiado.
Para un periodista es interesante no dejar indiferente a nadie.
-Sí, creo que eso es bueno y, sobre todo, provocar alguna reacción cuando te dedicas a esto del periodismo. Es una profesión que tiene que ser incómoda y eso puede provocar reacciones de todo tipo.
¿No concibe el periodismo amable o complaciente?
-Complaciente me parece un buen término porque el periodismo no tiene que buscar complacer, pero tampoco tiene por qué ser agresivo.
¿Se puede ser no agresivo y a la vez no complaciente?
-Creo que sí. En no ser agresivos y tampoco complacientes pienso que estamos nosotros, y que ese es el equilibrio que queremos buscar.
‘Salvados’ comenzó en clave de humor y ahora su clave es de seriedad periodística. ¿Era inevitable ese salto?
-El programa va a cumplir siete años, quién lo iba a decir. Este tiempo nos ha hecho crecer con el formato. Bajo el mismo nombre de Salvados se han hecho muchos programas diferentes y eso nos ha dado vida. Si hubiéramos seguido haciendo el Salvados de la primera temporada, ya no estaríamos en antena.
¿Se siente en su salsa cuando genera polémica?
-No la busco, las polémicas son como los suflés; de repente parece que se vaya a acabar el mundo y no, a la semana te das cuenta de que también ha pasado. Lo que buscamos es intentar sorprender, informar, investigar y provocar un tipo de reacciones en el espectador, y estas reacciones pasan porque la audiencia saque sus propias conclusiones.
Vivimos unos momentos políticos delicados para algunos, pero para la profesión periodística se presentan como apasionantes, ¿no le parece?
-Totalmente apasionantes, y además coincide con un momento en el que la ciudadanía tiene un interés altísimo en saber qué está pasando o qué va a pasar.
Podemos se ha convertido en revulsivo y enemigo de muchos y está dando mucho titulares.
-Qué quieres que te diga, a Podemos le están haciendo grandes los otros. Acabo de entrevistar a Esperanza a Aguirre y sin preguntarle por Podemos, ella me ha hablado minutos y minutos de Podemos. En algunos momentos, he llegado a pensar que a lo mejor era una táctica. Sin ninguna pregunta mía ella ya había hablado varias veces de Podemos.
Esperanza Aguirre también da buenos titulares.
-Es cierto y es una entrevistada muy difícil, pero que muy difícil. La compararía con un equipo de Mourinho. Son equipos que paran el juego, que protestan al árbitro y que a veces, sin que el árbitro lo vea, pisan a un rival. Aguirre se ajusta a eso.
¿Hace juego sucio Esperanza Aguirre?
-Ja, ja, ja? ¿He dicho yo eso? Es como es y juega a lo que juega.
¿Ha mostrado en su entrevista que es el verso suelto del PP?
-Es que ella se reivindica como verso suelto y se vanagloria de gozar de esa libertad, así la vamos a ver en el programa del domingo (mañana), y en la entrevista no tuvo ningún problema en decir que ella no pondría la mano en el fuego por Rajoy.
Ha sorprendido la promoción de ‘Salvados’ hecha por Podemos.
-Ha habido dos cameos de representantes muy potentes de Podemos como son Pablo Iglesias e Iñigo Errejón. Quería que en esa promo todos nos riésemos un poco de nosotros mismos. Queremos que la gente juegue a la ironía y al sarcasmo, a autoparodiarse, y en esta promoción estaban esos ingredientes.
Con tanta cercanía, ¿muchos apuestan que usted votará por el partido de Iglesias?
-Que vengan conmigo a las urnas y que vean la papeleta que cojo. No les he votado nunca.
Solo se han presentado una vez.
-Por eso, por eso? Ja, ja, ja.
¿Usted pondría la mano en el fuego por esas encuestas que están poniendo tan nerviosos al PP y al PSOE?
-No. No me creo las encuestas en general, pero creo que ahora mismo hacer una encuesta en España es muy complicado. Teniendo en cuenta el grado de cachondeo en el que vive el país, mucho menos.
¿No cree que las encuestas sean serias?
-¿Quién nos dice que muchos de los encuestados no piensan: “Voy a contestar esto y luego hago lo que me da la gana?”. Ahora mismo, las empresas demoscópicas tienen que estar muy preocupadas porque resulta muy difícil tomarle el pulso a la ciudadanía.
¿Esto es bueno o malo?
-No lo sé. Que un ciudadano mienta en una encuesta y que luego vote lo que quiera, no me parece especialmente malo. Eso sí, entiendo que para los de la encuesta es una putada.
Da la sensación que Jordi Évole va siempre muy acelerado.
-Una vez que empieza el programa no. Pero sí es cierto que cuando estamos a punto de estrenar una temporada, me acelero un poco. Luego se pasa y todo va rodado, pero sí, voy acelerado, están las promociones, las entrevistas, el comienzo? En fin, nada especial pero te puede alterar un poco.
¿A qué se dedica cuando no hace televisión?
-A jugar con mi hijo porque él se queja mucho de que me ve poco, así que cuando no estoy trabajando en televisión le dedico todo mi tiempo.
Del Barça, supongo.
-Muy del Barça, qué te puedo contar, que es el mejor equipo, que desde hace un mes lo veo mucho mejor y más tranquilo. Del Barça totalmente. Hace un mes le veía muy mal pero ahora no. Esto del fútbol es como los programas de televisión, van muy mal y luego se recuperan.
Este fin de semana juega en San Mamés con el Athletic. ¿Se atreve a hacer un pronóstico?
-Tengo una enorme simpatía al Athletic?
Y eso lo dice porque le estoy llamando desde Bilbao, ¿no?
-No, no? En el equipo del programa hay dos hermanas vascas, Leire e Itziar Larizgoitia, de Llodio. Es que le tengo mucho cariño a Euskadi. El Athletic ha sido un equipo con el que me lo he pasado muy bien. He ido a finales que han coincidido que el Barça jugaba con él. Y la verdad, convivir con la afición del Athletic es una gozada. En el campo ganamos, pero a nivel de afición no.
¿Y el pronóstico?
-0-1. Con un gol me conformo... y con los tres puntos para el Barça.