La hermana del técnico de emergencias que vivía en Gasteiz y que murió en 2023 en el atropello múltiple en el centro de salud de Haro ha asegurado este martes en el juicio que el procesado les "arrebató la vida" a toda su familia, porque su padre murió dos meses después.
Esta mujer ha declarado en la segunda jornada del juicio con jurado que se celebra en la Audiencia de La Rioja, por el atropello en el que también resultaron heridas otras cinco personas por un vizcaino que padece esquizofrenia paranoide, a quien el fiscal le acusa de ser el presunto autor de un delito de asesinato y de otros cinco en grado de tentativa.
Por estos hechos, el Ministerio Público pide para el acusado una sentencia absolutoria y un plazo máximo de 25 años de internamiento médico; su defensa, su absolución con una medida de libertad vigilada por su enfermedad; y las acusaciones particulares solicitan diversas penas, que oscilan entre 74 y 12 años de prisión, con 5 de libertad vigilada, además de diferentes indemnizaciones.
"No podíamos estar más unidos, era como otro hijo para mí. Para mi padre lo era todo, se fue con él", ha subrayado la hermana del técnico de emergencias fallecido. Ha recalcado que a su padre "le mató el mismo" que mató a su hermano, "a los dos meses", algo que ha corroborado su otro hermano, quien ha pedido "justicia" y que el acusado cumpla una pena. Ambos han estado en tratamiento psicológico y farmacológico tras la muerte de su hermano, quien vivía con su novia en Gasteiz, pero visitaba con frecuencia a su familia.
Una situación catastrófica
En el juicio ha testificado un médico que reside en Haro, quien estaba en casa y acudió a socorrer a sus compañeros tras el atropello múltiple. "Me encontré una situación catastrófica, todos acudieron a mí y actué como médico principal, realizando triajes, valoraciones y estabilizaciones paciente por paciente", ha explicado, lo que le provocó un trastorno de estrés agudo, que derivó en estrés postraumático fármacos y psicoterapia.
Los agentes de la Policía Local de Haro que llegaron al centro de salud han explicado que sacaron al acusado, residente en Basauri, del interior de su vehículo, quien gritaba que todo lo había hecho él y que "la culpa es del Gobierno".
Han dicho que el procesado reconoció que había atropellado a los sanitarios porque pensaba que eran policías, lo trasladaron a la comisaría sin que opusiera violencia y se quedó dormido en el calabozo. Un amigo del acusado con el que había viajado a Barcelona el fin de semana anterior ha declarado que estaba en tensión porque pensaba que les perseguían y estaban en peligro; y ha añadido que desde que comenzó a trabajar en la Policía Local de Bilbao –cuerpo del que le expulsaron tras sufrir su primer brote psicótico en 2020– "no volvió a ser el mismo, algo le pasó".