El pasado mes de agosto la Guardia Civil detuvo en el aeropuerto de Bilbao a una mujer que transportaba 370 gramos de cocaína escondidos en dos paquetes bajo la ropa pegados a su cuerpo.

Fueron los vigilantes de seguridad durante uno de los controles aleatorios en los accesos a la zona de embarque y desembarque quienes detectaron la droga. Fue en el momento de realizar una exploración superficial detectaron un objeto sospechoso adherido a su cuerpo, y fue entonces cuando avisaron a los agentes de la Guardia Civil.

Los agentes procedieron a identificar a la cajera, con pasaporte extranjero y en posesión de una tarjeta de embarque para un vuelo con destino Suiza. En el registro corporal a la mujer se le hallaron los dos paquetes, que contenían en total 370 gramos de cocaína, por lo que fue detenida.