Bilbao. Ariel, el ciudadano de origen brasileño detenido el pasado lunes como presunto autor de la agresión a M. F. y B. M., de 18 y 17 años, respectivamente, continúa en dependencias policiales. El hombre, acusado de un intento de homicidio, permanece en las comisaría de la Ertzaintza de Gernika a la espera de pasar a disposición judicial, algo que sucederá, presumiblemente, en las próximas horas.
La Policía vasca continúa trabajando para obtener las pruebas decisivas que determinen la culpabilidad o inocencia del detenido. Como ya adelantó DEIA, la Policía Científica analiza la ropa que el detenido llevaba la madrugada del pasado sábado con la intención de hallar rastros de ADN que correspondan con el de los dos jóvenes agredidos. No en vano, según varios testigos, la noche del ataque el presunto agresor circulaba con una motocicleta, "con síntomas de embriaguez", por las inmediaciones del restaurante Eneperi. Incluso llegó a caerse en varias ocasiones y al tratar de ayudarle respondió de forma violenta y los testigos pudieron ver que "llevaba la camiseta manchada de sangre". Del mismo modo, agentes de la Ertzaintza localizaron, en una inspección ocular de la zona de la agresión, la funda de un cuchillo de grandes dimensiones, si bien, aún no se ha podido localizar el arma.
Ariel fue detenido de forma oficial en torno a las 16.00 horas del pasado lunes en su domicilio de Bakio. La declaración de B. M, el menor agredido, fue esencial para que se llevara a cabo la detención. Y es que el joven identificó a Ariel con un alto grado de fiabilidad en varias fotografías que le mostraron durante su declaración.
La del lunes no fue la primera vez que un coche patrulla de la Er-tzaintza se llevaba a Ariel a las dependencias policiales. Tal y como adelantó DEIA el pasado domingo, la noche de aquel sábado, horas después de que se cometiera la agresión, dos patrullas de la Policía vasca se personaron en la residencia de Ariel y, tras realizar un registro de la vivienda, le trasladaron, en calidad de testigo, hasta la comisaría de Gernika, donde se le tomó declaración.
Según indicaron a DEIA testigos de la acción policial, tras el registro, el hombre fue introducido en un coche patrulla y los agentes salieron de la casa con una bolsa. Horas después, el hombre fue puesto en libertad, si bien el pasado lunes fue detenido de forma oficial acusado de un delito de intento de homicidio.
