El verano vatocando a su fin y eso significa que a la gran mayoría de nosotrosse nos acaban las vacaciones. Además, los adultos no tenemos períodode adaptación como los niños de preescolar así que no es deextrañar que a más de uno la vuelta al trabajo le siente como unjarro de agua fría.
Pero tengo buenasnoticias para todos vosotros. Existen distintas técnicas demindfulness que nos van a ayudar a controlar la ansiedad de la vueltae incluso a disfrutar de las pequeñas cosas que conforman la rutinade nuestro día a día. Empezamos:
- Tomaconciencia de la realidad. No aproveches el trayecto de caminoal trabajo en el metro o en el bus para anticipar las tareas oproblemas que te encontrarás al llegar a la oficina. Apaga elpiloto automático y concédete unos minutos para observar larealidad que te rodea, sin juzgar. Mira a los otros pasajeros,siente el traqueteo del vagón o del bus, fíjate en los sonidos quese producen al frenar o al abrir y cerrar las puertas? Verás cómote relajas y llegarás a la oficina con mejor ánimo.
- Si puedes,no pases de 0 a 100 en un segundo. Es decir, cuando llegues a tumesa de trabajo, tómate tu tiempo antes de encender el ordenador.Respira, sé consciente de tu entorno, mira qué ha cambiado y quéno en el tiempo que has estado fuera. Observa, sin prisas, elespacio en el que estás y la gente que hay en él. Disfruta de esemomento.
- Haz unpequeño stop de vez en cuando. No se trata de que te escaqueesde tus obligaciones, sino que te lo tomes con calma y no tesobrecargues de tareas desde el primer día. Levanta la vista de lapantalla y toma conciencia del entorno que te rodea. Si puedes, miraalguna vez por la ventana y observa lo que hay fuera. Haciéndolo,además de descansar la vista, también estarás relajando tu mente.
- Dedicatiempo a la meditación. Tras las vacaciones, la vorágine deltrabajo y las tareas domésticas del día a día han vuelto a tuvida. Lo mejor que puedes hacer cuando llegues a casa es parar unmomento para meditar, analizar lo que has hecho a lo largo de todoel día y ponerlo en valor. Ya verás como al terminar te sentiráscomo nuevo.
- Y, unúltimo consejo, si puedes, cuando acabe la jornada laboral,desconecta el móvil, al menos el móvil del trabajo. Una vezapagado, pon toda tu atención en el aquí y ahora y disfrútalo.
Siguiendo estos consejos, te centrarás en el presente y no darásvueltas a la cabeza sobre lo duro que es el final de las vacaciones.