El verano vatocando a su fin y eso significa que a la gran mayoría de nosotrosse nos acaban las vacaciones. Además, los adultos no tenemos períodode adaptación como los niños de preescolar así que no es deextrañar que a más de uno la vuelta al trabajo le siente como unjarro de agua fría.

Pero tengo buenasnoticias para todos vosotros. Existen distintas técnicas demindfulness que nos van a ayudar a controlar la ansiedad de la vueltae incluso a disfrutar de las pequeñas cosas que conforman la rutinade nuestro día a día. Empezamos:

  1. Tomaconciencia de la realidad. No aproveches el trayecto de caminoal trabajo en el metro o en el bus para anticipar las tareas oproblemas que te encontrarás al llegar a la oficina. Apaga elpiloto automático y concédete unos minutos para observar larealidad que te rodea, sin juzgar. Mira a los otros pasajeros,siente el traqueteo del vagón o del bus, fíjate en los sonidos quese producen al frenar o al abrir y cerrar las puertas? Verás cómote relajas y llegarás a la oficina con mejor ánimo.
  2. Si puedes,no pases de 0 a 100 en un segundo. Es decir, cuando llegues a tumesa de trabajo, tómate tu tiempo antes de encender el ordenador.Respira, sé consciente de tu entorno, mira qué ha cambiado y quéno en el tiempo que has estado fuera. Observa, sin prisas, elespacio en el que estás y la gente que hay en él. Disfruta de esemomento.
  3. Haz unpequeño stop de vez en cuando. No se trata de que te escaqueesde tus obligaciones, sino que te lo tomes con calma y no tesobrecargues de tareas desde el primer día. Levanta la vista de lapantalla y toma conciencia del entorno que te rodea. Si puedes, miraalguna vez por la ventana y observa lo que hay fuera. Haciéndolo,además de descansar la vista, también estarás relajando tu mente.
  1. Dedicatiempo a la meditación. Tras las vacaciones, la vorágine deltrabajo y las tareas domésticas del día a día han vuelto a tuvida. Lo mejor que puedes hacer cuando llegues a casa es parar unmomento para meditar, analizar lo que has hecho a lo largo de todoel día y ponerlo en valor. Ya verás como al terminar te sentiráscomo nuevo.
  1. Y, unúltimo consejo, si puedes, cuando acabe la jornada laboral,desconecta el móvil, al menos el móvil del trabajo. Una vezapagado, pon toda tu atención en el aquí y ahora y disfrútalo.

Siguiendo estos consejos, te centrarás en el presente y no darásvueltas a la cabeza sobre lo duro que es el final de las vacaciones.