El PSOE reformará su Código Ético para considerar como motivo de expulsión del partido actos de sus militantes que conlleven "solicitar, aceptar u obtener un acto sexual de una persona a cambio de una remuneración", ya que lo considera "absolutamente incompatible" con la militancia socialista.

Según ha anunciado la formación en un comunicado este viernes, el PSOE y sus órganos federales tramitarán estos casos como "una falta muy grave" de acuerdo a los estatutos federales, imponiendo, además, "la máxima sanción, que es la expulsión del partido".

Reunión con las secretarias de Igualdad

Esta decisión ha sido anunciada por el presidente del Gobierno y líder socialista, Pedro Sánchez, en la reunión con las secretarias de Igualdad de la formación que ha mantenido esta tarde en Ferraz, después de que un informe de la UCO revelara conversaciones del exministro José Luis Ábalos y su exasesor Koldo García sobre mujeres.

En el comunicado, el PSOE incide en que su formación considera que el "sistema prostitucional es una expresión de violencia contra las mujeres", algo "incompatible con los principios de los derechos humanos y la ética democrática, ya que implica tratar a las mujeres como objetos o mercancías y no como sujetos de derechos".

En esa línea, los socialistas insisten en que persiguen la abolición de la prostitución, porque defienden un modelo que luche por la desaparición de las causas que obligan a las mujeres a prostituirse.

Los estatutos actuales establecen que se expulsará a los condenados por delitos contra la libertad sexual. En el Congreso de Sevilla del pasado mes de noviembre, varias agrupaciones provinciales propusieron reformar las normas internas para expulsar a aquellos afiliados que pagaran por sexo, pero finalmente se descartó.