El lehendakari ha escenificado este martes su respaldo al idioma corso, que tiene un problema de difusión y se enfrenta al reto de conseguir el estatus de lengua cooficial en el Estado francés. Es una condición que sí tiene reconocida el euskera en el Estado español, pero no al otro lado de la muga. Por lo tanto, lo que se ha producido este martes ha sido un cierre de filas ante el Estado francés para reclamar la cooficialidad de las lenguas propias.

En la segunda y última jornada de su viaje a Córcega, Iñigo Urkullu visitó el centro de inmersion lingüística Savaghju-Vivariu, a media hora de la ciudad de Corti, y lo hizo acompañado por el presidente del Consejo Ejecutivo del territorio, Gilles Simeoni. Urkullu, quien recordó que él mismo fue profesor de filología vasca, apostó por invertir en las lenguas minorizadas y reveló que está trabajando en un protocolo de intercambio de experiencias e información. Corsica trata de lograr el bilingüismo a través de actividades en centros de inmersión que puedan asegurar la transmisión del idioma y batallar por su cooficialidad.

EL VETO FRANCÉS

El lehendakari recordó que el 8 de abril de 2020 la Asamblea francesa aprobó la ley de protección de las lenguas sin el respaldo del Gobierno galo, una ley que abría la puerta a la inmersión en la escuela en idiomas como el corso, el occitano, el bretón o el euskera en el Estado francés. Recordó que el Consejo Constitucional no aceptó la inmersión con el argumento de que relega al francés, aunque se dejó el camino libre a que se puedan financiar experiencias de ese tipo. En 2020, una delegación corsa viajó a Iparralde para conocer las ikastolas de inmersión en euskera e importar el modelo a la isla.Urkullu mostró su empatía y alertó del riesgo de desaparición de los pueblos como consecuencia de la "pérdida de los idiomas propios".

Pidió un "ejercicio de responsabilidad" ante la "pluridiversidad". "Trabajemos por la pervivencia de nuestros idiomas como señal de pervivencia de nuestros pueblos", alentó.

LA OFICIALIDAD

Urkullu recalcó que la oficialidad es clave para conseguir el uso de un idioma en todos los ámbitos, también en la administración, y que su uso no se limite al ámbito doméstico o entre los niños y niñas. El lehendakari dijo que la comunidad autónoma y la colectividad de Córcega trabajan en un protocolo de intercambio de experiencias e información en relación al proceso de normalización lingüística, con varios ámbitos de trabajo: legislación, proceso de revitalización de la lengua, educación y experiencia de los modelos lingüísticos; y compromiso público y privado.

CUATRO CENTROS

Simeoni recalcó que conseguir la cooficialidad del corso en el Estado francés es un objetivo central: "Se trata de un reto muy importante para todas las sociedades y, en particular, para un pueblo tan pequeño como el nuestro".

En su objetivo por alcanzar el bilingüismo en Corsica, se ha considerado que la inmersión es "la herramienta de aprendizaje más eficaz". Por ello, la Colectividad de Córcega ha apoyado la creación de cuatro centros de inmersión gestionados por asociaciones y, además, aporta la mayor parte de la financiación.

Son los centros de Savaghju-Vivariu, Bastia-Campanari, Loretu di Casinca y Bastelica. En ellos se imparten clases con distinta periodicidad y duración, y se fomenta el uso de la lengua corsa durante las actividades escolares, artísticas, deportivas o de estudio del medio ambiente.