Duración: 1h 15 minutos de juego.

Saques: 1 de Bengoetxea VI (tanto 10) y 1 de Artola (tanto 5).

Faltas de saque: 1 de Bengoetxea VI.

Pelotazos: 604 pelotazos a buena.

Tantos en juego: 12 de Bengoetxea VI, 10 de Artola y 1 de Albisu.

Errores: 4 de Bengoetxea VI, 2 de Aretxabaleta, 6 de Artola y 2 de Albisu.

Marcador: 1-2, 2-2, 5-3, 5-5, 6-5, 6-6, 7-6, 7-7, 8-10, 10-10, 12-11, 13-11, 16-12, 17-12, 17-13, 18-17, 18-18, 19-18, 20-19, 20-20, 21-21 y 21-22.

Botilleros: Sin botilleros, al tratarse de un enfrentamiento entre dos parejas de la misma empresa, Asegarce.

Apuestas: De salida se cantaron posturas de doble a sencillo a favor de Artola-Albisu.

Incidencias: Partido correspondiente a la novena jornada de la liguilla de los cuartos de final del Parejas de Primera de la LEP.M disputado en el frontón Beotibar de Tolosa. Lleno. 1.200 espectadores.

bilbao - Iñaki Artola y Jon Ander Albisu abrieron ayer brecha en el Parejas. Y puede ser definitiva. Al imponerse en el Beotibar de Tolosa -que registró un llenazo y un partido magnífico- a Oinatz Bengoetxea y Andoni Aretxabaleta, sus inmediatos perseguidores en la tabla clasificatoria, los guipuzcoanos marcan las distancias entre los cuatro binomios que ya se mecen en puestos de semifinales y el resto. Y es que, el primer choque carnavalero tenía gran importancia para las aspiraciones de unos y otros para seguir con vida en el campeonato. De este modo, la victoria de Artola y Albisu les deja muy bien posicionados para continuar hacia la siguiente fase del Parejas. Lo mismo pasa con Ezkurdia-Zabaleta, Berasaluze II-Zubieta y Martínez de Irujo-Barriola, a los que les viene de perlas que Bengoetxea VI, quizás el delantero más en forma, y Aretxabaleta cayeran por la mínima. La hoja de ruta marca ya que hay tres triunfos entre los dos duetos colíderes y ellos, que marcan el quinto puesto. El tercer y el cuarto puesto están, asimismo, a dos partidos. Una falla importante aunque no definitiva.

El encuentro jugado ayer en el Beotibar fue grandilocuente y, quizás, el mejor de los jugados por ahora en el Parejas. Los cuatro pelotaris se exprimieron en 604 pelotazos marcados por dos guiones muy distintos. Por un lado, Bengoetxea y Aretxabaleta argumentaron solidez en la zaga e inspiración delante; mientras que Artola y Albisu asfaltaron su camino con el alquitrán de la pegada, aunque el de Alegia tiene magia. Los guipuzcoanos forman un dueto de potencia.

Con ese planteamiento sobre el tapete verde del Beotibar, fue Bengoetxea VI quien tomó el mando, porque en el bombardeo podía perder a Andoni, que aguantó todo el encuentro desde el siete y medio sin perder pie y con solamente dos errores. Rompió la dinámica Oinatz casi de salida tras encajar un 0-2 basado en el dominio de Albisu, en el que se agrandó Artola con dos paradas al txoko.

Pero ahí estaba el leitzarra, quien buscó pelota y asomó galones para eliminar las distancias. Un Bengoetxea en estado de gracia fue suficiente para destronar a los guipuzcoanos y una tacada de cinco tantos le puso en ventaja. Pero tal fue la batalla, que el dominio no se concretó. Ni entonces ni después. Ambos delanteros estuvieron muy inspirados y los yerros llegaron en la búsqueda de la excelencia, bailando en el alambre, lo que encendió al público.

Igualaron a cinco los jóvenes y no se despegaron hasta el 12-11, en el que Bengoetxea VI encontró huecos bien secundado por Aretxabaleta. Respiraron. 16-11. Pero fue un espejismo. La gran habilidad de Artola 17 el guante. Empataron a diecisiete y el envite tomó un cariz cardiaco, mientras el respetable aplaudía un tanto enorme, de bella factura, que acabó con un fallo de Oinatz en el remate, pero que se había macerado entre defensas imposibles y pelotaris por el suelo.

No se rompió la igualdad hasta el 18-18. Bengoetxea sumó dos tantos más a su cuenta. Pero Artola respondió: una cortada con la izquierda y un gancho soberbio. 20-20. Falló el leitzarra en la siguiente con el sotamano y les puso a los guipuzcoanos la miel en los labios. Pero tuvieron que pelear. Oinatz no se achicó. Ni un pelo. Creció. Cuestión de galones. Cogió el partido por la solapa. Cortada al ancho. Tanto. 21 iguales. Pero el destino, a veces, es cruel. Y la moneda salió cruz en la última del navarro. Parada al txoko. Chapa. 21-22. Brecha.