Iker y Eneko Pou han hecho historia en el Himalaya tras completar con éxito Los 4 Elementos, un proyecto que iniciaron en 2017 con el objetivo de conquistar cuatro puntos del planeta que tuvieran vinculación con el aire, el agua, el fuego y la tierra.

En su haber ya tenían los tres primeros. En la Patagonia abrieron Aúpa 40, el primer elemento aire. La apertura de Yakumama, aquel mismo año en la selva amazónica, fue agua y Leve Leve en la isla africana de Sao Tome y Príncipe, el fuego. Por tanto, tan solo les quedaba la última para hacer realidad su objetivo.

Los gasteiztarras habían escogido para ese último elemento las Torres del Trango, ubicadas en la cordillera del Karakorum. Consideradas un conjunto de torres de roca de las más difíciles del mundo, no han representado a la postre ningún obstáculo para los alaveses, que en el Himalaya han estado acompañados por la británica Fay Manners.

Iker y Eneko han regresado del Karakorum pakistaní con la friolera de seis rutas abiertas, entre las que destaca la última al Trango II donde han dejado constancia de su buen hacer firmando su mejor apertura hasta la fecha en el Himalaya con Waa Shakil 6b/70º/M.5/2.200 metros. En concreto, veinte largos en roca por una arista muy estética para pasar después a un terreno de alpinismo clásico que combina la escalada mixta con la escalada en hielo.

El descenso fue épico con la ventisca arreciando mientras los tres escaladores lograban escapar por los pelos de la trampa, a la vez que improvisaban un rapel de fortuna tras otro camino de la seguridad del último campo de altura. Durante el proceso de aclimatación hicieron una actividad muy interesante que fue la primera escalada de “Dommage pas de Fromage” 6c/250 metros al Little Trango, una preciosa aguja de 5.700 metros que escalaron junto a Andrés Marín y Fay Manners y que dedicaron a una compañera de montaña tristemente desaparecida.