Novak Djokovic avanza en el Abierto de Australia con el horizonte despejado por su parte del cuadro, aunque con las sombras de su estado físico. Ayer jueves tuvo que ser atendido de sus problemas en el muslo izquierdo, que reconoció que “no está bien”, pero ello no le impidió superar al francés Enzo Couacaud en cuatro sets: 6-1, 6-7, 6-2 y 6-0. “Solo tengo dos opciones: dejarlo o seguir luchando. Los Grand Slams te dan siempre un día entre partidos, al menos tienes algo de tiempo para recuperarte. Y eso es lo que voy a hacer. No pienso entrenar durante estos días”, explicó el serbio, que se enfrentará en tercera ronda a Grigor Dimitrov, otro veterano peligroso.

Fuera de su control, Djokovic vio caer al noruego Casper Ruud, segundo cabeza de serie, y al estadounidense Taylor Fritz, octavo. En este caso, afeó el espléndido día del tenis de su país, que va repuntando y ha colocado ocho jugadores entre los 32 mejores, pero curiosamente no al mejor clasificado de todos ellos.

La jornada en el Abierto de Australia se prolongó hasta pasadas las cuatro de la madrugada en Melbourne que fue cuando acabó el duelo entre Andy Murray y el local Thanasi Kokkinakis. El admirable escocés remontó dos sets en cinco horas y 45 minutos, en lo que fue el segundo partido más largo de la historia del torneo. Murray, cerca de los 36 años y con una prótesis de cadera, ha superado las diez horas de juego en dos jornadas. No fue la única remontada del día ya que Roberto Bautista superó dos sets en contra para vencer a Brandon Holt, otro estadounidense, y citarse con Murray. En cambio, le ocurrió lo contrario a Pablo Carreño, que cedió ante el francés Benjamin Bonzi tras ganar los dos primeros parciales.

En el cuadro femenino, la gran sorpresa fue la eliminación de Ons Jabeur, segunda favorita, que no llegó a Australia en su mejor condición y lo pagó con derrota ante la checa Marketa Vondrousova, finalista de Roland Garros en 2019.

Nadal, seis semanas

El balear confirmó ayer jueves que sufre una rotura muscular en el psoas iliaco de la pierna izquierda y será baja entre seis y ocho semanas. Esto significa que Nadal podría estar de vuelta para la gira de Indian Wells y Miami que se pondrá en marcha a comienzos de marzo. Sin embargo, su objetivo es llegar en la mejor condición a los torneos de tierra y, sobre todo, a Roland Garros.