bilbao - “Por fin acaba el año”, arrojaba Fernando Alonso, feliz por ver la luz al final de un túnel que quizás son dos, después de protagonizar la enésima debacle de la temporada, el nonagésimo test para la poco halagüeña temporada 2016 de McLaren-Honda, que sigue dando palos de ciego en el plano del desarrollo.

Paradójicamente, ayer mismo, la escudería británica y su coalición con la fábrica japonesa perdió uno de los récords que ostentaba en la Fórmula 1 desde 1988, cuando Alain Prost y Ayrton Senna asieron el volante de uno de los coches más perfectos de la historia. Por aquel entonces cifraron su dominio en un 82,9%, el mayor porcentaje de puntos conseguido en una campaña, que aquel año se celebró con 16 carreras.

El monopolio de Mercedes, en el cierre del año que fue el Gran Premio de Abu Dhabi, trazó nuevas fronteras: 86% de los puntos de un curso que se ha disputado a 19 pruebas. Un total de 703 unidades de las 817 que Lewis Hamilton y Nico Rosberg podrían haber sumado en 2015. Hamilton, campeón del mundo, pone el candado a la temporada con diez victorias, por las seis de Rosberg, que ha encadenado las tres últimas de la temporada, las carreras que le han sobrado a su compañero de equipo tras coronarse. Ha espabilado tarde o el tricampeón inglés estaba ya de vacaciones.

El dominio de Mercedes se ha extendido más allá en cuanto a cifras para la memoria. Con la primera posición de Rosberg y la segunda de Hamilton en el circuito de Yas Marina, la escudería alemana ha conseguido esta temporada su duodécimo 1-2, lo que es el mayor número de dobletes de la historia en un mismo año. Fe del soporífero autoritarismo.

Al contrario que Alonso, que McLaren, que Ferrari, que todos los demás, la jerárquica escudería alemana detendría el tiempo para seguir con su ciclo de dominación, el que representó ayer, en el último capítulo. Rosberg no dio opción, inmutable en el liderato, apenas acosado por Hamilton, ambos Mercedes corriendo en un mundo paralelo, a años luz de la galaxia en la que vive el resto, la tónica del resto del año. El aburrimiento del espectador, la lápida de la emoción.

Apenas hubo gracia. Si es que la hubo. El cuarto puesto del Mundial, las migas, era lo único en juego dentro de lo destacado de una temporada. Ese fue para Kimi Raikkonen, tercero ayer, inmediatamente delante de su compañero en Ferrari, Sebastian Vettel. El alemán se lanzó desde la 16ª pintura de la parrilla. Pero es que si Mercedes vive en la nubes, Ferrari está en la copa de un árbol, sobre la tierra firme de los otros equipos.

Raikkonen, liquidando a casi 20 segundos del vencedor, cazó la cuarta plaza del campeonato en detrimento de Valtteri Bottas, que la pifió en el pit-lane, donde se chocó con el McLaren de Button mientras este retomaba la carrera al cambiar neumáticos.

Envuelto en problemas, para variar, se vio Alonso, en la primera curva de la prueba. En la apurada de la frenada recibió el impacto de Nasr y acabó estrellándose contra Maldonado, a quien dejó fuera siendo el único abandono en el artificialmente iluminado Yas Marina. El asturiano, además, fue sancionado por ello con un pit-stop. “Si no sale un safety car, me retiro”, dijo en la vuelta 26 de las 55 pactadas, con la carrera hipotecada desde el amanecer. ¿Problemas mecánicos? ¿Falta de profesionalidad? ¿Hastío? ¿Justificado? El caso es que terminó, y fue 17º. Otra mancha. Tiene cuatro meses de parón de carreras para hacer cábalas.

Carlos Sainz, a quien la fortuna le viene dando la espalda, esta vez le flaqueó otro pit-stop, llegó a rodar 7º y concluyó 11º. Nada más ocurrió siendo digno de ser reseñable.

“El año que viene puede llegar cuando quiera. Podría empezar mañana si fuese por mí, no hay problema, no necesito vacaciones”, anheló Rosberg tras bajar el telón. Lo cierto es que mucho tiene que cambiar la situación en invierno para que algún equipo intimide a Mercedes, porque lo que ha pescado Ferrari casi todo ha sido por demérito ajeno más que por mérito propio. Malos tiempos para los amantes de la Fórmula 1. “Nos están adelantando por la derecha otras competiciones”, advirtió Alonso. Más allá de que sus palabras puedan evidenciar su frustración, no miente.

clasificaciones

1. Nico Rosberg (Mercedes) 1h.38:30.175

2. Lewis Hamilton (Mercedes) a 8.271

3. Kimi Raikkonen (Ferrari) a 19.430

4. Sebastian Vettel (Ferrari) a 43.735

5. Sergio Pérez (Force India) a 1:03.952

6. Daniel Ricciardo (Red Bull) a 1:05.010

7. Nico Hülkenberg (Force India) a 1:33.618

8. Felipe Massa (Williams) a 1:37.351

9. Romain Grosjean (Lotus) a 1:38.201

10. Daniil Kvyat (Red Bull) a 1:42.371

11. Carlos Sainz (Toro Rosso) a 1:43.525

12. Max Verstappen (Toro Rosso) a 1 vuelta

13. Jenson Button (McLaren) a 1 vuelta

14. Valtteri Bottas (Williams) a 1 vuelta

15. Marcus Ericsson (Sauber) a 1 vuelta

16. Felipe Nasr (Sauber) a 1 vuelta

17. Fernando Alonso (McLaren) a 2 vueltas

18. Will Stevens (Manor) a 2 vueltas

19. Roberto Merhi (Manor) a 3 vueltas

Pastor Maldonado (Lotus) Abandono

1. L. Hamilton (GBR/Mercedes)381 puntos

2. Nico Rosberg (ALE/Mercedes) 322

3. Sebastian Vettel (ALE/Ferrari) 278

4. Kimi Räikkönen (FIN/Ferrari) 150

5. Valtteri Bottas (FIN/Williams) 136

6. Felipe Massa (BRA/Williams) 121

7. Daniil Kvyat (RUS/Red Bull) 95

8. Daniel Ricciardo (AUS/Red Bull) 92

9. Sergio Pérez (MEXForce India) 78

10. Nico Hulkenberg (ALE/F. India) 58

11. Romain Grosjean (FRA/Lotus) 51

12. Max Verstappen (HOL/T. Rosso) 49

13. Felipe Nasr (BRA/Sauber) 27

14. Pastor Maldonado (VEN/Lotus) 27

15. Carlos Sainz (ESP/Toro Rosso) 18

16. Jenson Button (GBR/McLaren) 16

17. Fernando Alonso (ESP/McLaren) 11

18. Marcus Ericsson (SUE/Sauber) 9

19. Roberto Merhi (ESP/Manor) 0

20. Alexander Rossi (USA/Manor) 0

21. Will Stevens (GBR/Manor) 0

1. Mercedes 703 puntos

2. Ferrari 428

3. Williams 257

4. Red Bull 187

5. Force India 136

6. Lotus 78

7. Toro Rosso 67

8. Sauber 36

9. McLaren 27

10. Manor 0