No hay etapa sin caída. Esta vez le ha tocado a Mikel Landa. A esta Itzulia le ha mirado un tuerto, eso está claro. Lo de las caídas está repercutiendo mucho en el ritmo de la carrera. Sin los grandes favoritos no hay corredores que rompan. Skjelmose está un peldañito por encima del resto, pero los otros están muy igualados. Se mantiene todo como cuando se supo cuál iba a ser el recorrido. Todos éramos conscientes de que los días decisivos y van a ser la crono y el último día, en Eibar. Solo las caídas han roto esa dinámica. No se han hecho diferencias. Es posible que para la etapa final, la que lo decida todo, al líder le interese una fuga que coja mucho tiempo. Pero también es cierto que hay muchísima gente metida en menos de un minuto. En la etapa con final en Amorebieta, desde mi punto de vista, se ha visto al equipo del líder bastante justito. El gran problema que se le puede plantear a Skjelmose tal vez sea que no sepa qué corredor tenga que marcar, a cuál salir, sobre todo entre los del UAE. Me da la impresión de que se la va a tener que jugar con uno del UAE: McNulty, Del Toro o Ayuso. Son muchos para cómo se ha visto al Lidl. En ese aspecto me da la impresión de que todo está muy abierto. Si bien considero que el hombre más fuerte de la carrera es Skjelmose, el problema que se le presenta es a quién cerrar. En Muniketa, que es un puerto en el que han pasado 34 ciclistas, se ha visto al líder bastante atado. En cuanto a los nuestros, creo que Pello Bilbao puede tener opciones de lograr la Itzulia si lee correctamente la carrera. Es un corredor inteligente y tendrá que estar atento a los movimientos de los secundarios. Probablemente Skjelmose bloquee a Ayuso, que es el que más le acecha Si fuera Pello estaría pendiente de lo que puedan hacer Del Toro y McNulty. Las opciones pasan por ahí. De todos modos, la etapa se puede plantear como una clásica y en un recorrido tan explosivo puede pasar cualquier cosa.