31 y por fin mano

HAN pasado esas mismas jornadas, 31, y por fin el Athletic guiña el ojo sin rubor. Noventa minutos han sido suficientes para demostrarse y demostrarnos que se pueden hacer las cosas tan bien como en el Estadio de la Cerámica. Las piezas estuvieron perfectamente colocadas en el terreno de juego y todos a su manera brillaron en un partido por el que, a priori, casi nadie daba un euro. Victoria contundente en lo futbolístico del Athletic, no en el marcador, ya que pudo ser mucho mayor la diferencia.

El equipo de Kuko brilló de tal manera que la unanimidad sobre lo visto es total. En todas las líneas se trabajó a un nivel altísimo. Los que antes parecían vulgares se transformaron en grandes futbolistas y entre todos anularon a un rival que luchaba por ser quinto de la liga. La superioridad rojiblanca fue tal que se veía bien a las claras en los rostros de los jugadores del Villarreal la frustración por asistir a un baño en toda regla de los visitantes. Puede que estemos ante el mejor partido fuera de casa de las últimas tres temporadas.

Iturraspe volvió a mandar en el centro del campo, bien acompañado por Mikel San José. Los jugadores de banda se multiplicaban y Raúl García cuajó una de sus mejores actuaciones como rojiblanco en todos los conceptos. Arriba Williams demostró que aún fallando puede ser un autentico quebradero de cabeza para los rivales y una solución óptima para los suyos. El balón al espacio es su fuerte y cuando hay desmarque y buen envío el gol está cerca. El lunes tuvo hasta el premio de perforar la malla de Asenjo, el mejor de los amarillos.

El equipo lo hizo prácticamente todo bien, con balón y sin él. Robó rápido y manejó el esférico con el criterio tantas veces demandado. Atrás los leones amarraron cualquier opción de peligro. Mención especial para Iñigo Martínez, que está de auténtico lujo. El ondarrutarra desde su llegada tiene claro lo que debe hacer y lo hace, vaya si lo hace. Ziganda por fin se llevo una alegría, yo me alegro por él.

La mejor noticia, ademas del juego y el resultado, fue el regreso de Iker Muniain, con gol además. El pequeño pero gran jugador sonríe de nuevo y la afición con él. Han sido muchos meses en la oscuridad y entrenando en solitario para reaparecer incluso en tiempo récord. Es un futbolista muy importante para el Athletic. Ongi etorri fenómeno.